Cómo plantar Glicina en tu jardín: la planta más hermosa e hipnótica que crea escenarios únicos

Fue una de las plantas exóticas que Marco Polo trajo a Europa como un regalo de Oriente

Glicina
Sin comentarios Twitter Flipboard E-mail

Originaria de China, la glicina es una planta oriental que llega a Europa en manos de Marco Polo como un regalo de nuestros vecinos de Oriente. Una planta invasora en su entorno y con unas cualidades increíbles para germinar, la glicina es un arbusto caducifolio trepador que puede alcanzar un gran tamaño y se llena cada primavera de flores de color violeta, azul, malva o blanco, que se agrupan en grandes racimos.

Dicen de ella que es una planta hipnótica y hermosa por sus preciosas flores colgantes que te dejan prendido durante minutos en cada una de sus terminaciones. Además, en primavera, este arbusto leñoso se torna selvático, con un follaje muy tupido y es una planta invasora, por lo que se extiende con suma facilidad.

Cómo cultivar glicina en el jardín

Glicina

Conocerás la glicina por sus hojas grandes, en color verde claro, y flores abiertas por racimos, todas al mismo tiempo que son un espectáculo incalculable de colores vibrantes y combinaciones de estilos que te dejarán prendido. Un arbusto para disfrutar y muy fácil de germinar ya que solo con colocar las semillas fértiles en una servilleta húmeda, a la semana ya verás sus primeras raíces. Después solo tendrás que insertar el corte tapando la tierra y regarlo de forma abundante.

La multiplicación por esquejes se ha convertido en una técnica muy útil y rápida para conseguir nuevas plantas en poco tiempo. En este caso, tendremos que elegir una estaca leñosa en verano y cultivarla en condiciones controladas (invernadero o interior), y utilizando hormonas enraizantes como recomendación para acelerar su crecimiento.

En cuanto al abonado, una planta como la wisteria sinensis que produce gran cantidad de flores y crece de forma enérgica durante largo tiempo (vive más de 100 años), necesita de una fuente constante de nutrientes, sobre todo en la etapa de floración. Podemos utilizar estiércol, compost, o bien abonos minerales NPK.

Después, solo debes cuidar su exposición solar (seis horas al día) y la fertilidad del suelo donde se plantan, ya que, aunque parezca contradictorio, no ha de ser demasiado fértil. Cumple estos requisitos y veras como las glicinas comenzarán a inundar tu jardín con preciosos racimos en tonos morados que cubrirán las paredes y espacios como mantos de poder, sabiduría y creatividad.

Imágenes | Unsplash

En Decoesfera | Los hibiscos necesitan cuidados especiales en otoño: qué debes hacer ahora para que florezcan como nunca el próximo año

En Decoesfera | Octubre es el mes crucial para los limoneros: con este gesto asegurarás su supervivencia en invierno

En Decoesfera | Estos son los mejores sitios para colocar la monstera en casa: crecerá de forma espectacular

Inicio