Esta es la petición de nuestra lectora Alejandra desde México:
"Buenos días, me encantaron sus ideas para hacer un sofá, y ya estoy en búsqueda de los materiales! Solo tengo una duda: ¿como puedo hacer esos grandes cojines que ponen ustedes en sus fotografías? Una vez intente hacerlos yo misma y me quedaron amorfos, sin volumen y feos.... ¿Algún buen tip?"
Como comenta Alejandra, en un post anterior dábamos pistas para construir un sofá. En nuestras propuestas se incluían grandes cojines que cubrían las estructuras y hacían las veces de asientos. Atendiendo esta demanda intentaremos dar unas claves para conseguir unos asientos firmes a la par que cómodos.
Se pueden realizar de dos maneras, obteniendo dos tipos de asiento diferentes: colchoneta, plana y de aspecto uniforme o grandes cojines, abultados y mullidos.
Para confeccionar la colchoneta se necesita una plancha de gomaespuma cortada a medida según nuestras necesidades. Se pueden encargar en tiendas de colchones. Este material se encuentra en distintas densidades, siendo conveniente pedir consejo al respecto en la tienda, donde deberían tener muestras disponibles. Para este trabajo necesitaremos una plancha que no sea muy blanda ya que de lo contrario tendríamos la sensación de estar sentados en el suelo.
Una vez que tengamos nuestra pieza hay que hacerle una funda. Escogeremos una tela teniendo cuidado de que sea de fácil lavado, pues al ser desenfundable podremos lavarla regularmente.
Para elaborar la funda cortaremos varias piezas tomando como ejemplo el dibujo. La pieza de cierre se compone de dos trozos de tela C, unidos por una cremallera. Una vez unida a la pieza de contorno B, solo hay que coserla a las piezas A, derecho contra derecho, dejando la cremallera abierta para poder dar la vuelta a la funda sin problemas.
Los cojines gigantes deben rellenarse de algo más consistente que una simple guata. Si observamos el interior de un almohadón de nuestros sofás, veremos que estos suelen llevar una pieza de gomaespuma unida a un saco de relleno para darle más consistencia.
Siguiendo este ejemplo realizaremos dos sacos de retor de la misma medida. Los rellenaremos con el contenido escogido: guata, copos de gomaespuma o plumas. Colocaremos entre ambos una plancha de gomaespuma de unos doce centímetros de grosor y de una superficie más pequeña que los sacos. Una vez colocados como si fueran un sandwich, los uniremos con unas sólidas puntadas, resultando un único saco con un cuerpo de gomaespuma en su interior.
Haremos tantos rellenos como cojines necesitemos y ya no quedará más que realizar unas bonita fundas y disfrutar de nuestro sofá.
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