Mi ficus tiene las hojas amarillas: estos son los motivos y las soluciones para que recupere su lustre de siempre

Las hojas amarillas de tu ficus son una señal de que algo no va bien 

Ficus
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El ficus es una de esas plantas de interior que nunca pasan de moda. Pese a que llevan décadas en nuestras casas dando un aire tropical a cualquier rincón, lo cierto es que esta planta sigue estando de tendencia. Como prueba, no hay más que echar un vistazo a las redes sociales para comprobar que el ficus benjamina, el ficus elástica y, sobre todo, el ficus lyrata, son todo un fenómeno viral.

Estas plantas no solo son bonitas y animan cualquier casa. Además, eliminan los contaminantes ayudando a purificar el aire de nuestro hogar. Y son bastante fáciles de cuidar. Aún así, en ocasiones pueden darnos algún susto.

Los motivos por los que las hojas de los ficus se vuelven amarillas

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Que tu ficus tenga algunas hojas amarillas es algo normal. Las hojas más antiguas envejecen y se vuelven amarillas antes de caerse. El problema es cuando hay demasiadas hojas amarillas. Eso es una señal claro de que algo no marcha bien para la planta. El problema es que puede haber múltiples motivos por lo que esas hojas se vuelven amarillas. 

Ciclo natural. En ocasiones, las hojas más viejas de los ficus se renuevan y comienzan amarillear uniformemente teniendo una posterior caída.

  • Problemas con la luz. El ficus es una planta que necesita mucha luminosidad, aunque siempre indirecta. Si la tienes en un lugar sin luz, las hojas se volverán amarillas y llegarán a caerse, por lo que deberás buscarle una nueva ubicación. 
  • Quemaduras por el sol. Si el ficus está expuesto al sol, sus rayos quemarán las hojas y se volverán amarillas. Así que traslada la planta a otro lugar de manera urgente. 
  • Exceso de riego. Si te pasas con el agua, tu ficus se resentirá. El ficus necesita riego abundante durante la época de crecimiento, pero aún así, es importante no excederse.  Si te has pasado con las aportaciones de agua, deja secar el sustrato y espacia los riegos. 
  • Cambios repentinos de temperatura y corrientes de aire. Los cambios de temperatura bruscos no son buenos para los ficus. Además, debes tener cuidado con las corrientes de aire y con la calefacción. Si lo tienes cerca de un radiador, aléjalo de inmediato y búscale un nuevo sitio.
  • Faltan nutrientes. Si ves que las hojas nuevas salen amarillas, tu plata está afectada por clorosis férrica, provocada por la falta de hierro.  
  • Hongos y plagas. Si las hojas de tu ficus comienzan a amarillear de repente, y no tienes problemas con el agua, la luz o la temperatura, puede que tu planta esté afectada por alguna plaga. En este caso, deberás revisar el envés de las hojas para detectar su presencia. Estos insectos chupan la savia, y causan la decoloración de las hojas. Para evitar su presencia, o la de los hongos, deberás aplicar un fungicida orgánico una vez al mes. En caso de que la planta esté ya afectada, puedes usar un insecticida ecológico para acabar con ellos

Fotografías | Freepik, Photo By para Pexels

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