Los huertos urbanos están de moda. Además de darnos alimentos frescos y saludables, estos huertos son una fantástica terapia para desconectar del estrés y buscar nuevas aficiones que nos hagan olvidarnos del estrés del trabajo. Ver crecer las plantas, y observar cómo van dando frutos, es una experiencia única (apta solo para gente paciente, también hay que decirlo).
Así que tanto si estás ya metido en el mundo de los huertos urbanos, o si quieres meterte en él, hoy te traemos una selección de cinco variedades de verduras y hortalizas que puedes plantar este mes de agosto.
Qué plantar en agosto en tu huerto urbano
Los tomates sin duda son la estrella en muchos huertos. Nos encanta ver cómo crecen, y cómo van cogiendo ese tono rojo que tanto nos gusta. Y por supuesto, nos encanta ese momento en el que están maduros, soltando ese aroma inconfundible, para dar color y sabor a nuestras ensaladas.
Aunque el tomate se suele plantar en primavera, si en tu zona el calor se extiende hacia el otoño (y eso es cada vez más común en casi todo el país), puedes plantarlo ahora para recogerlo antes de que llegue el frío. Para llegar a tiempo, en lugar de semillas, deberás hacerte con unos plantones en tu vivero más próximo. Recuerda proporcionarles suficiente agua y darles un soporte para que crezcan verticalmente.
Las zanahorias es otra verdura que puede sembrarse en esta época del año. Puedes cultivar tus semillas de zanahoria, a una profundidad mínima de 30 cm, y a una distancia de 10-15 cm. Deberán estar en un lugar sombreado, y con sustrato capaz de retener el agua. Deberás regarla de forma natural.
Las judías verdes son fáciles de cultivar y tienen un crecimiento bastante rápido, por lo que todavía estás a tiempo para plantarlas en agosto. Las judías necesitan suelo húmedo pero no encharcado y temperaturas más bien cálidas pero sin exceso de calor. Y recuerda que deben tener un buen drenaje.
Los rabanitos se pueden plantar en cualquier época del año. Y además, cuidarlos es de lo más fácil. Siémbralos en un suelo rico en materia orgánica, dejando unos 7 cm entre las semillas. Y dales sol y humedad constante, regándolos por la noche. Los tendrás listos para comer 25 días después de la siembra.
La remolacha también es bastante fácil de cultivar. Primero, deberás dejar germinar las semillas la noche anterior a la siembra. Cuando llegue la mañana, siembra las semillas dejando 30 cm de distancia entre ellas. El sustrato debe ser rico en materia orgánica, y contar con un buen drenaje. Asegúrate de que recibe sol directo. Y podrás recolectarlas a las 10 semanas del momento de la siembra.
Fotografías | Markus Spiske en Unsplash, Nick Fewings en Unsplash, philippe collard en Unsplash
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