El Home Staging cada día está más cerca de nosotros y nos parece una forma recurrente e ideal para transformar con método expres zonas o viviendas que necesitan un arreglo inmediato para ponerlas a la venta, alquilarlas por un largo periodo de tiempo o de manera vacacional. Os mostramos el resultado de la decoración y el amueblamiento de una vivienda en el barrio de La Latina (Madrid) para alquiler vacacional, con todos los toques y tendencias que la hacen cómoda y detallista para los turistas de paso.
En la calle Toledo y con toques castizos esta casa es un prototipo ideal de eclecticismo. El Proyecto ha sido guiado de la mano del equipo de Francisco Peláez, Ainhoa Martín y en colaboración con del Pablo Gómez, Estudio de arquitectura Rez, los cuales han dado el cambio necesario a esta vivienda con una superficie de 72 metros cuadrados. Muchas ideas para conseguir que nuestro hogar sin ser un lugar vacacional respete las últimas tendencia venidas de las manos de profesionales, que saben lo que hacen y conceden el gusto y la necesidad en todos sus espacios.
Revestimientos y detalles que siempre funcionan
En esta propiedad quedan eliminados los pavimentos cerámicos y se opta por revestimientos cada rincón con el efecto veteado de la madera, comenzamos con calidez.
Los asientos de fibra natural y piel frecuentan el comedor y un pequeño lugar de reposo o lectura, identificado como único por su alfombra redonda tejida en fibra de cuerda.
Las tonalidades predominantes, los colores neutros y blancos nevados, éstos son los que hacen resaltar el muro-panel de ladrillo visto desgastado recubierto de madera oscura y rústica, ideal para dejar espacio abierto a la cocina y mantener cierto desapego.
Como detalles para adornar las paredes y, por ser una vivienda de tránsito, son pocos, espejos, tapices y escuetos cuadros. Tampoco falta el toque vegetal, con grandes hojas dispuestas en un jarrón de vidrio sobre un aparador de cristal e hierro negro forjado.
Sobre el espacio del comedor, queda centrada con la mesa redonda de madera lacada en blanca, una lámpara de tulipa globo que convertirá la zona en espacio poco agobiante y equilibrado. Para darle color a la sala de estar se decora con una alfombra de tejido artesanal en color rojizo, con este ligero detalle la atmósfera dialoga entre sí.
Cocina funcional de mezcla ecléctica
Bancos de estilo industrial en color verde agua y decapados se combinan con una larga barra en altura de madera desgastada, un juego de contrastes con los ladrillos vistos del frente de trabajo y de la pared. Lo normal en cocinas de viviendas vacacionales es el color blanco, aunque nos encantan las que consideran el color cemento e incluso los negros, de grandiosa personalidad.
Detalles de almacenaje y otros para inspirar
La zona de almacenaje ha sido pensada para que al inquilino no le falte huecos donde guardar sus pertenencias y se acomode como en su propia casa. Cajones, baldas y percheros son más que suficientes para sus necesidades. El color blanco forma parte de esta la apuesta del estudio, Martín Peláez.
Esta es la casa de los espejos, sí, espejos rectangulares, redondos y enmarcados en las zonas de paso. Una vivienda que para mi gusto habría decorado con fotografías en blanco y negro típicas castizas y de zonas emblemáticas la ciudad, lo que supondría unas paredes más hogareñas y estéticamente llamativas para el turismo. Hemos encontrado alguna de ellas sobre el mueble de pasillo.
Los detalles originales como la lámpara flexo de pie, la mesita auxiliar de color verde cálido y la estructura del sofá forrado en textil gris verdoso, juegan un papel fundamental, con carisma y buena presencia para la que puede ser tu próxima casa de vacaciones. ¿Has cogido nota?
Fotos | Martín Peláez