Parece que el invierno es una época en la que es imposible tener plantas con flor. Una estación en la que en teoría las plantas hibernan a la espera de florecer en primavera. Pero nada más lejos de la realidad. Aunque muchas plantas ralentizan su actividad, hay otras plantas que echan flor en los meses más fríos del año.
Entre ellas, está el brezo. Una planta que está entre mis preferidas por la delicadeza de sus pequeñas flores, y porque es ideal para decorar un centro de mesa, o para colocar en una maceta de fibras naturales dando el punto de encanto a cualquier espacio.
El brezo (3,99 euros) es una planta perenne que puede alcanzar hasta 20 metros de altura en el caso de algunas variedades arbustivas, aunque también es una planta que se utiliza para dar color en el interior, aunque en este caso, no suelen sobrevivir al año a causa de la calefacción.
El brezo comienza a florecer a finales del otoño, con unas pequeñas flores que permanecen durante todo el invierno. Y si sabemos mantener el brezo, esta especie puede dar flores durante casi todo el año.
Brezo en maceta
Consejos para cuidar el brezo
Para empezar, hay que elegir el mejor sitio para ponerlo. Y si lo tienes en el interior de tu casa, deberás tenerlo en un lugar que le dé bastante el sol, y alejarlo todo lo que puedas de la calefacción. Debes tener en cuenta que si el brezo tiene demasiado calor, se le pueden llegar a caer las hojas. Si la tienes en el exterior, también tendrás que ponerla en una zona con abundante luz solar.
En lo que respecta al riego, el brezo necesita riegos frecuentes con agua, blanda y sin cal, para mantener el sustrato húmedo, aunque no hay que encharcarlo. En caso de que encharques la tierra, podrían aparecer hongos o incluso llegar a pudrirse las raíces, provocando la muerte de la planta. En verano deberás regar la planta cada dos o tres días en pequeñas dosis, mientras que en invierno tendrás que espaciar el riego, controlando si el sustrato está húmedo o no.
Foto: WiktorD para Canva.com
También deberás prever un buen drenaje en el suelo de tu jardín, o en la maceta, para que las raíces no sufran el exceso de agua. Prevé un buen drenaje en el suelo de tu jardín o en la maceta para asegurar que las raíces no sufren por el exceso de agua.
Para que el brezo viva feliz, el sustrato debe ser ligeramente ácido, por debajo de pH6: el más adecuado es el compuesto por turba rubia y arena (4,39 euros). Además, el brezo necesitará un fertilizante para plantas acidófilas (4,99 euros) en primavera y a finales de verano si quieres que la siguiente floración sea espectacular.
Turba rubia MASSÓ 5L
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Precisamente, para asegurar esa floración, deberás podar la planta cuando comience la primavera, eliminando las flores viejas. También deberás podar los brotes más altos, cortando por debajo de las flores.
El consejo deco. Si se te seca la planta, no la tires. El brezo seco quedan genial para decorar una mesa de fiesta, o para crear composiciones con capazos (13,99 euros) o con macetas de fibras naturales.
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Fotografía de portada | KaarinaS para Canva.com
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