Por su decoración desenfada y divertida con referencias marítimas y por su tipo de comida -comida fusión hawaiana y japonesa-, el True Sushi es uno de los restaurante más frescos de Madrid. Situado en el número 28 de la calle San Francisco de Sales, el estudio As Interiorista se ha encargado de su decoración, supliendo la falta de recursos -el presupuesto era muy ajustado-, con altas dosis de creatividad e ingenio.
Para desarrollar el proyecto en Adriana y Caridad se inspiraron en una antigua anécdota ocurrida en 1991 en el Pacífico. Al parecer, un contenedor cayó por la borda durante el trayecto China - Estados Unidos, lo que supuso la liberación de su contenido -ni mas ni menos que 29.000 patitos de goma- en el Océano Pacifico. Después de algunos años dando vueltas por las mismas aguas, los patitos comenzaron a llegar a las costas de Hawái y Japón, convirtiéndose en un símbolo de suerte para aquellas personas que los encontraron.
En al decoración del restaurante hay muchas referencia a esta historia. Lo que más destaca es el impresionante mural que representa la gran ola de Kanagawa, además las lámparas de techo son peces de origami y la barra, sobre la que se ha colocado una pergola, tiene un lago con patitos de goma que puedes pescar con una caña para que te traigan suerte. La decoración se completa con estantería de madera geométrica tras la barra y unos neones que hacen referencia a la historia en que se basa el proyecto y aportan el punto rock and roll.
La fachada del restaurante está cubierta con cañas de bambú natural rematadas por un tejado de tejas negras sobre el que se ha colocado el logo.
El resultado final es un ambiente muy fresco, que nos traslada a algún punto cerca de una playa. Como el restaurante de una playa, en pleno centro de Madrid.
Vía As Interiorista