María Lancha
EditorEn decoración, el baño ha dejado de ser un espacio meramente funcional para convertirse en una estancia clave dentro del diseño interior. Cada vez más, buscamos que sea práctico, cómodo y, sobre todo, estéticamente cuidado, sin trastos de por medio ni accesorios que impidan el buen funcionamiento del cuarto de baño.
Félix García (@transformadecoracionyreformas), interiorista especializado en proyectos residenciales, lo tiene claro: un baño bonito no es cuestión de metros cuadrados, sino de decisiones bien pensadas. Y comparte tres claves esenciales para conseguir un resultado elegante y actual.
Jugar con las proporciones
Los Hermanos García
"Fíjate como hemos colocado un mueble que tiene aire a los dos lados para la toalla y para el WC", explica García. En un baño bien diseñado, las proporciones lo son todo. El interiorista apuesta por muebles que respiren, es decir, piezas que no vayan de pared a pared, sino que dejen aire a ambos lados.
En el ejemplo que propone, el mueble del lavabo se coloca dejando espacio lateral suficiente para colgar la toalla y para que el inodoro no quede encajonado. El resultado es un baño más ligero visualmente y mucho más cómodo en el día a día. "Que tengas espacio suficiente para pasar cómodo", señala.
Cerámica con intención
Los Hermanos García
El segundo consejo tiene que ver con los revestimientos. Lejos de apostar por una única cerámica uniforme, Félix García recomienda combinar superficies lisas con otras de relieve. Esta mezcla aporta profundidad y dinamismo sin necesidad de recargar el espacio.
La clave está en la iluminación, porque el relieve se potencia gracias al LED integrado en el espejo y en elementos como la hornacina, creando juegos de luces y sombras que elevan el diseño.
Hornacinas
Los Hermanos García
Y llegamos al punto más contundente de su discurso: el almacenamiento en la ducha. Félix García es tajante, las cestas colgadas no son una opción estética. “Quedan feísimas”, afirma sin rodeos. En su lugar, es mejor optar por otras alternativas más elegantes y acorde con la moda actual en le baño.
La alternativa perfecta es la hornacina integrada en la pared, un recurso cada vez más habitual en baños bien diseñados. Permite tener los botes de champú y gel ordenados, accesibles y perfectamente integrados en el conjunto, sin romper la armonía visual del espacio. Además, si se reviste con la misma cerámica o se ilumina con LED, se convierte en un elemento decorativo más.
Fotografía de portada | Los Hermanos García
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