El mercado de la vivienda está tensionado en media España con alquileres y precios disparados. Esos precios desbocados, sumados a un Euribor que no para de crecer, lleva a todas las personas que quieren comprarse una vivienda a pensárselo dos veces y a analizar todos los aspectos que pueden influir en el proceso de compra, y en la vida que llevarás en esa vivienda.
Por eso, además de tomarse la compra con calma evitando prisas e improvisaciones, hay una serie de claves que debes tener en cuenta antes de firma una hipoteca, y evitar posibles problemas en el futuro.
Estudia la ubicación
¿Centro, o afueras de la ciudad? Esta decisión tiene un condicionante económico, ya que suele ser más caro comprarse una casa en el centro que en la periferia o en algún pueblo cercana a la ciudad en la que vives. Pero además del tema económico, piensa en tu estilo de vida, y en tus necesidades presentes y futuras. Si te gusta salir de casa y ver tiendas y vida, lo tienes claro: un piso céntrico o en algún barrio no muy alejado es lo que buscas.
Pero si te gusta vivir en un adosado o en un chalet, piensa también en el futuro. Si tienes hijos pequeños, cuando crezcan tendrán que salir con los amigos, o deberán realizar desplazamientos para estudiar. Y ahí te tocará hacer seguramente de chofer. Son aspectos a analizar para que puedas elegir la opción que más te convenza.
Cuidado con las gangas
El mercado de la vivienda está disparado. Y es cierto que podemos encontrar pisos a buen precio si provienen de las bolsas de viviendas que los bancos tienen en propiedad, o si es una casa de una herencia que corre prisa vender. Pero aún así, desconfía de los chollos. Puede que ese piso tenga cargas fiscales, o que el edificio tenga una gran reforma pendiente, o que esté situado en una calle con problema de ruidos nocturnos a causa de los bares que hay en los bajos. Estudia también las calidades, y si necesita una reforma integral.
Cuidado con la calefacción, la energía y los aislamientos
Cuando vayas a comprar una vivienda, deberás estudiar también toda la parte energética. Si compras una casa etiqueta A en la categorización de eficiencia energética, podrás ahorrar un 89% con respecto a una calificación F. Comprueba el aislamiento de las ventanas, pregunta por el sistema de calefacción, y en caso de ser calefacción comunitaria, pregunta por el precio para evitar sorpresas.
Al estudiar las hipotecas, asegúrate de que se ajusta a tu sueldo
Cuando estés mirando hipotecas en los bancos, asegúrate de que el pago mensual de la hipoteca no es más del 30-35% de tus ingresos. De esta manera podrás combatir subidas del Euribor, o poder afrontar gastos imprevistos. Piensa además que deberías tener unos ahorros que supongo al menos el 20% del precio de la casa, que suele ser la parte que no cubre el préstamo hipotecario. En este sentido, los bancos suelen conceder hipotecas de entre un 70 y un 80% sobre el valor de tasación de la vivienda. Y cuenta también con gastos extra como el notario, la escritura...
Cuidado con las clausulas abusivas
Al firma la hipoteca, que no te la den con queso. Estudia muy todas las clausulas de la hipoteca, y ten cuidado con las condiciones. El banco no puede obligarte a contratar seguros o productos. Pero sí que es legal que si contratas determinados productos, las condiciones de tu hipoteca puedan mejorar.
Fotos | Tierra Mallorca para Unsplash, Katja Rooke para Unsplash
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