No se me ocurre un adjetivo mejor que soberbio o magnífico para definir la casa del arquitecto Yvan Prokesch en Chêne-Bourg, cerca de Ginebra. Un edificio protegido, bajo el estandar Minergie, diseñado por la famosa firma de arquitectos Gigon y Guyer de Zurich.
Arquitectura de vanguardia, arte en cada rincón, espacios despejados, coleccionismo, y diseño elevado a la enésima potencia en este magnífico piso donde la luz y las vistas también tienen mucho que decir.
Un inciso para comentaros que el estándar Minergie define un edificio de muy bajo consumo energético; por eso y por criterios específicos, el confort para los usuarios es excelente.
Las medidas pasivas para obtener el estándar son: un buen aislamiento térmico, la minimización de puentes térmicos, una compacidad alta del volumen del edificio, así como el aprovechamiento de la radiación solar; por eso se debe respetar la orientación y las oberturas acristaladas, para así poder almacenar ganancias térmicas solares en invierno a través de masa activa con inercia térmica alta. Y ahora seguimos con esta espectacular casa y su propietario.
Si os gusta la arquitectura y estáis al día de las novedades,** Yvan Prokesch** no os sonará desconocido, ya que a pesar de su juventud se codea con los grandes y es un puntal en las ferias internacionales.
Después de licenciarse en Arquitectura, Yvan dejó su Ginebra natal para continuar su formación en universidades norteamericas de prestigio, incluyendo Columbia NY, donde obtuvo un Master en "Diseño Arquitectónico Avanzado" bajo la dirección de Bernard Tschumi.
Se mudó a Nueva York y comenzó con su meteórica carrera proyectando residencias privadas en los Hamptons, apartamentos de lujo en Manhattan, cualquier proyecto que le permita dar rienda suelta a su prolífica imaginación y agudo sentido de la estética, donde (usando una frase de moda) no hay lineas rojas entre arte y diseño. Sus habilidades le permiten hacer un hermoso lugar en el residencial de lujo.
En 2010, le proponen regresar a Ginebra para encargarse de la arquitectura interior de varios edificios aceptó de inmediato y buscó este maravilloso apartamento que nos ha cautivado por sus grandes espacios abiertos, su buen gusto, su calidez, su luminosidad, la sobriedad de sus zonas más intimas y el tratamiento de cada una de sus escogidas piezas de arte y decoración contemporánea.
Para los más observadores ¿Os habéis fijado en las lámparas palmeras de metal de Maison Jansen? Una integración perfecta en un interiorismo tan moderno.
Si la casa de Yvan Prokesch es un reflejo de sus proyectos, en cuanto me toque la lotería le voy a encargar un chalecito en Gstaad con vistas a las montañas nevadas. ¿Quién se apunta?
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