A estas alturas del verano la mayoría de vosotros ya habréis oído hablar de uno de los grandes descubrimientos del momento: el escutoide. Se trata de un sólido geométrico limitado por dos superficies paralelas, polígonos unidos por una curva o una conexión con forma de Y entre sus vértices... Bueno, lo mejor es verlos en imágenes para entender la explicación.
Se descubrió a raíz de una investigación del Departamento de Biología Celular y el Instituto de Biomedicina de la Universidad de Sevilla y el mes pasado se publicaba en la revista Nature, Pero, para nosotros, en lo que a decoración se refiere, lo más interesante del asunto es que varios de estos escutoides pueden unirse para llenar todo el espacio entre las dos superficies paralelas a las que pertenecen los polígonos que los forman.
Con lo que nos gusta la geometría a los amantes de la decoración, un descubrimiento como este no podía pasar desapercibido y es por eso que, aunque en agosto buena parte del sector deco está de vacaciones, algunos ya se han lanzado a la impresión 3D del escutoide y a la creación de complementos decorativos en base a él.
De entrada, y sin mucho esfuerzo, ya se ve como punto de partida para organizadores de escritorio, para lapiceros y también para pequeñas macetas, pero a mayor escala, yo apuesto a que en breve lo veremos también como pieza modular para la composición de asientos y mesas auxiliares.
Varios escutoides macizos que se unen o se separan en función de las necesidades de cada momento para dar lugar a mesas a taburetes de mayor o a menor tamaño... ¿Es muy friki mi idea? o ¿Vosotros también veis que a nivel decorativo el escutoide es un gran descubrimiento?
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