Con la subida de las temperaturas llegan los indeseables mosquitos, y su insoportable presencia que, ciertamente, nadie tolera con agrado en este mundo.
Mantener a estos desagradables insectos alejados al máximo es una de las mejores opciones para salir indemnes de las picaduras de estos pequeños vampiros y de sus primos, los mosquitos tigre, que tan extendidos están en la actualidad.
Por fortuna, existen plantas que los repelen naturalmente, yendo mucho más allá de la lavanda y la menta, que desprenden unos aromas que estos insectos detestan.
La lavanda y la menta son grandes aliados en este cometido, pero no son los únicos. Otra planta que también es útil para combatir este tipo de plagas es la bergamota silvestre.
Esta planta tiene grandes ventajas y se caracteriza, sobre todo, por un intenso aroma, un crecimiento rápido y resistente, y su adaptación a diferentes tipos de suelos.
Esta planta florece entre los meses de junio y julio, y es cuando se se despliegan también sus potentes aromas con tanta potencia antimosquitos.
Esta es una robusta planta, que resulta estupenda para incluir en cualquier proyecto decorativo gracias a sus vistosas flores.
Además, es altamente atrayente de abejas para la producción de la miel, así como de fauna benéfica para el jardín.
Por otro lado, existe una alternativa que es el falso incienso (Plectranthus coloides). Esa es muy efectiva y también consigue mantener a raya a los mosquitos, aparte de crear un paisajismo natural y rústico que le dará una gran belleza a cualquier parterre.
Foto | Noelle Otto, Chris F y Tom Fisk.
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