Uno de los mayores quebraderos de cabeza a la hora de decorar una terraza o un jardín es que no hay tantas opciones como quisiéramos, especialmente si somos devotos de lo que se conoce como "modern classics".
Afortunadamente las empresas que poseen los derechos de explotación se están dando cuenta del potencial de este mercado y han empezado a adaptar los diseños para que resistan las inclemencias del tiempo. Cassina sacó hace un par de años los clásicos de Le Corbusier para exterior y esta primavera las mesas de Saarinen salen a la terraza, tal como ha anunciado la empresa Knoll en el Salón Internacional del Mueble de Milán.
Aunque mi versión preferida de acabados de la mesa tulip es la que tiene el sobre de mármol, por la tensión visual que produce ver esa fina lámina de mármol sostenida por una estructura tan frágil visualmente, para la versión de exterior se ha optado por piedra acrílica, gracias a su magnífica resistencia, y a una base de Rilsan.
Para acompañar a la eterna mesa de Saarinen (diseñada en 1956) podemos escoger las sillas de Harry Bertoia, que también estarán disponible en un acabado que las proteja de la humedad, el sol y los cambios de temperatura. Ahora ya no hay excusas para no tener una terraza de diseño.
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