El césped es un elemento clave en muchos jardines. Para que luzca espectacular debemos seguir unos cuantos consejos tanto para cortar como para abonar y escarificar. Por suerte, en el mercado tenemos soluciones que nos ayudan a que cuidar el césped sea mucho más fácil, gracias a la aparición de robots cortacésped que permiten cortarlo controlando el dispositivo desde el móvil mientras estamos haciendo otras tareas.
Al margen de estos avances, para que el césped luzca bien durante todo el año hay que seguir una serie de consejos. Pero antes de comenzar a cuidar el césped, es necesario eliminar las ramas y las hojas que cayeron durante los últimos meses rastrillando la superficie. Además, hay que tener en cuenta que a veces se forman manchas de humedad bajo las hojas que se han acumulado, y lo mejor es dejar secar antes de cortar.
Cómo cuidar el césped en primavera
El mejor momento para cortar el césped por primera vez tras el invierno es desde finales de marzo hasta el mes de abril. Es importante que en el momento de cortar el césped ya no haya heladas nocturnas. Dado que el invierno ha sido bastante cálido, tan pronto como veas que el césped crece, conviene proceder a cortarlo.
Debes tener en cuenta que el primer corte no debería ser demasiado corto; lo mejor es cortarlo unos cuatro centímetros. En esa tarea es importante evitar huellas que te costará deshacer en los siguientes meses.
Elimina las malas hierbas
En primavera verás como algunas zonas del césped todavía están algo enmarañadas. También puede ser que haya musgo, una especie que aparece cuando en el sustrato faltan nutrientes, cuando hay una aireación inadecuada o cuando se producen encharcamientos.
Y si no se trata la presencia del musgo, puede que haya zonas en las que esta especie desplace al césped. Para eliminarlo, hay que escarificar el césped arrancando el musgo con el mango de púas del escarificador, ya que penetra verticalmente en el césped y arranca tanto el musgo como las malas hierbas.
El escarificador debe moverse uniformemente sobre el césped, primero a lo largo y luego a lo ancho. Al hacerlo es importante que las cuchillas no penetren más de tres milímetros en el suelo, ya que el césped podría ser dañado.
Cómo escarificar
Escarificar es una de las tareas importantes para garantizar la buena salud del césped. La mayor parte de los expertos coinciden en que para escarificar el césped debe estar en fase de crecimiento. Lo mejor es escarificar después del segundo corte de césped.
Para evitar que el césped sufra en exceso, debes escarificarlo una o dos veces como máximo cada año. Por eso sólo debes escarificar tu césped una vez o como máximo dos veces al año. A la hora de escarificar, si se utiliza un escarificador manual, hay que pasarlo lo más uniformemente posible sobre la superficie del suelo.
La resiembra del césped, clave para cerrar las calvas
La presencia de calvas en el césped es una de las mayores pesadillas de las personas que tienen césped en el jardín. Y en primavera es el momento para acabar con esas áreas desnudas tan antiestéticas. La época adecuada para volver a sembrar en esas zonas es el mes de abril, una vez que has escarificado, y antes de abonar y encalar.
Calcificar el césped
Calcificar el césped potencia el enraizamiento, el crecimiento y retrasa el desarrollo de musgos y hongos. El uso de cal en el césped corrige el nivel de acidez y acerca el pH del suelo a la neutralidad, un nivel que permite optimizar la acción de los fertilizantes.
Tanto el musgo como las malas hierbas prefieren suelos ácidos, por lo que la cal previene nuevas infestaciones. La cal hay que echarla después de eliminar el musgo y escarificar, y antes de aplicarla, hay que determinar el pH del sustrato para saber la enmienda calcárea que habrá que aplicar. Tras el encalado, deberás dejar descansar brevemente al césped antes de continuar con los cuidados primaverales.
Fertilizante para aportarle los nutrientes que necesita
Para abonar, utilizaremos un fertilizante especial para césped. Y a hacerlo, es importante que el fertilizante se aplique de forma uniforme en toda la superficie de césped.
Para fertilizar, es mejor que elijamos un día nublado, ya que es probable que llueva pronto. Con el agua de lluvia garantizaremos que los nutrientes se filtren en el suelo. Además del abono especial para césped, podemos utilizar alternativamente un abono finamente tamizado como fertilizante natural.
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