Cuando voy de visita a una casa yo siempre me fijo en el felpudo y cuando subo o bajo en un edificio por la escalera me resulta curioso ver los diferentes felpudos que hay delante de cada puerta y que en el fondo dicen mucho de la personalidad de sus propietarios.
Elegir un felpudo puede parecer una tontería y sin embargo es una tarea complicada, es lo primero que alguien verá de nuestra casa y ya sabéis que la primera impresión es la que cuenta. Así que si no encontráis un felpudo a vuestro gusto siempre podéis comprar uno liso y personalizarlo cambiando su forma.
En este caso la inspiración ha llegado en forma de nube y la idea ha sido recortar un felpudo inicialmente rectangular haciendo curvas para conseguir el acabado deseado. El lado que va junto a la puerta lógicamente se debe dejar liso y es en el extremo opuesto en el que la forma se puede modificar a gusto del consumidor.
Para recortarlo podemos ayudarnos de algún objeto sólido que tenga la forma que deseamos y que podamos utilizar a modo de plantilla, un cutter hará el resto. Desde luego es algo que puede hacer cualquiera por si mismo en poco tiempo y que permite conseguir un felpudo original y personal de un modo sencillo y sin gastar mucho dinero.
Vía | Shine Dot Design En Decoesfera | Un felpudo para Halloween