El nombre de The Black House nos podría recordar algún oscuro club nocturno de mala fama o algún centro espiritual dedicado al culto satánico, pero en esta ocasión no se trata de estos temas. Hoy descubriremos una maravillosa casa muy moderna con una decoración estupenda y cuya característica es su color negro, tanto por fuera como por dentro. ¿Te parece demasiado negro? Espera a ver y te sorprenderás.
Si bien siempre agradecemos los estilos minimalistas claros, bien equilibrados y de un gusto relativamente sobrio, el negro resulta un color igualmente muy atractivo para el ambiente general de una casa moderna. Lejos de los estereotipos fáciles de que lo negro no da luz y resulta triste, hoy descubrimos con esta casa que podemos perfectamente bien tener el color negro como dominante sin perder en atractivo y estética.
Este loco proyecto de una casa todo de negro salió de la mente creativa de la diseñadora Amy Beaumont del despacho Knob Modern en Phoenix, Arizona en los Estados Unidos. La estructura original es una simple y típica casa de suburbio norteamericano del año 1964. Si la transformación exterior ha sido mínima y se ha enfocado principalmente en el color, el interior ha sido, por su parte, completamente transformado para crear un ambiente al estilo loft.
Las paredes fueron retiradas para abrir un único espacio de cerca de 100 metros cuadrados que alberga una sala de estar, una cocina, un dormitorio y un estudio/oficina. Para crear un poco de intimidad y tranquilidad para trabajar, la parte de la oficina cuenta con dos puertas corredizas metálicas que permiten adaptar el espacio a las necesidades del momento. Una gran idea que permite aislarse para una junta de trabajo sin perder luego la sensación de amplitud del conjunto.
La cocina, por su parte, es totalmente abierta hacia la zona de comedor de sala de estar. Con dos grandes muebles bajos y modernos, ésta se integra de manera discreta y eficiente al resto de la casa sin realmente que nos demos cuenta que es una cocina. El baño es otro espacio interesante ya que ha sido integrado parcialmente al dormitorio mediante una adaptación en “dressing room” en el que se encuentra el lavabo y un gran espejo. La ducha y demás servicios se encuentran aislados lo que los hace más íntimos y funcionales.
Para lograr dar un mayor efecto de grandeza y apertura los arquitectos decidieron retirar el plafón y dejar las vigas de madera aparentes. Pintando el techo de negro y dejando la madera de un tono oscuro, lograron un efecto de altura muy interesante. Así, toda la casa aprovecha la totalidad de la altura de techo lo que incrementa la impresión de espacio. Esto, sin darnos cuenta como visitantes, nos aporta más luz y rompe con el esquema de oscuridad que podría tener de lo contrario la casa.
La decoración interior no podía dejar de lado el uso casi provocativo del color negro. Por lo tanto, podemos encontrar una mayoría de muebles con el mismo tono con la notoria excepción del sofá de las sillas del comedor que, con su color miel, nos recuerda las vigas aparentes del techo. Los pisos son de concreto pulido en tono claro, convirtiéndose así en una fuente de luz muy intensa. La misma luz llega de manera fluida por grandes ventanas y puertas que dan hacia el exterior tanto del lado calle como del lado de un jardín y patio trasero.
¿Quieres saber cuál es el último dato interesante de esta casa? Pues resulta que The Black House se encuentra a la venta por la modesta cantidad de 354 000 USD, es decir unos 300 000 euros aproximadamente. Así mismo, la puedes alquilar por día a través de la plataforma AirBnB por unos 90 euros al día. ¿Te interesaría?
Imágenes | Knob Modern Design
