¿Eres de los que estás esperando a que todos volvamos de vacaciones para irte tú? ¿Buscas una casa con sabor para pasar unos días en el norte de Europa? Entonces, quizás te encaje esta casa holandesa que tiene un baño dentro de un armario.
Esta casa de ladrillo fue contruida en 1633 en Balk, una localidad que fue un importante cenro del comercio de mantequilla holandesa. La casa, que ha sufrido varias reconstrucciones a lo largo de su historia, fue vaciada por completo para sometarla a un proceso de rehabilitación para dividirla en tres apartamentos de alquiler para turistas.
Durante la rehabilitación, los elementos arquitectónicos originarios han sido restaurados, combinando así los detalles antiguos con un interiorismo moderno y con colores apagados.
De los tres apartamentos, destaca el apartamento Zon gracias a un techo histórico con tallas de madera que data probablemente del año 1800, y a una vieja cama de caoba del año 1900.
En el aparamento Forest, situado en la última planta, encontramos entre techos de madera abuhardillados dos viejos armarios camas que han sido transformados para acoger un cuarto de baño y un espacio para que pueda dormir un niño.
Una casa que resuma historia y elementos muy atractivos ideal para pasar unos días de relax en la siempre atractiva Holanda ¿Te animas a visitarla?
Más información | Buterhus
En Decoesfera | Una casa en Polonia perfecta para disfrutar del verano