Junto a dEmo, es el artista español que más conocido resulta al gran público. Su obra es reconocible por entendidos y profanos y no creo que (salvo Antonio López y su eterna Familia Real) haya ningún artista que haya retratado al Rey de España (hasta en dos ocasiones, que yo sepa).
Para muchos de nosotros que hemos crecido viendo sus famosas vacas pastando por las calles de nuestro país y su evolución en los últimos 20 años, es tremendamente familiar.
Me encantaría deciros que atesoro obra suya, pero me temo que tendré que esperar un poco más. Y eso que estoy segura que una in-fanta de naranja o una Audrey haciendo grafittis quedarían de lujo en mi salón.
Porque no sólo hablamos de arte. Sino de la reciente Historia de España y del mundo pasando por nuestros ojos, con ironía, con crítica y mucho, mucho humor. La música, la sociedad, el cine, los mitos tradicionales dentro y fuera de nuestras fronteras... todo tiene cabida en la obra de Antonio de Felipe.
Desde Marilyn hasta Lady Gaga han pasado por sus pinceles. Blancanieves mordiendo la manzana de Apple, el Buen Pastor con el corderito de Norit o su autorretrato con Los Beatles, bueno y un montón de gente que marcó a toda una generación.
Sus retratos pop, el homenaje a Velázquez, la colección cápsula sobre mujeres o las simbólicas esculturas tendrían cabida en la cualquier decoración y serían protagonistas absolutas.
Obra fácil de exponer, ya me imagino uno de los espectaculares cuadros de Antonio de Felipe sobre una cómoda de caoba inglesa o una consola dorada rococó ¿a quién no le gusta el Pop Art?
¿Os gusta la obra de Antonio de Felipe?
Más información | Antonio de Felipe
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