Cómo limpiar el sofá para dejarlo como nuevo con el mínimo esfuerzo

No es algo que limpiemos a diario, pero sí que deseamos que esté bien limpio porque pasamos en él buena parte del tiempo que estamos en casa... El sofá es uno de los grandes protagonistas de cualquier vivienda, tiene mucho uso y como tal requiere de un buen mantenimiento. Muchos utilizamos fundas para proteger el sofá a diario y porque son más fáciles de lavar con profundidad, pero aún con ellas un par de veces al año conviene limpiar el sofá propiamente dicho.

Antes de empezar

Antes de comenzar con la limpieza de las fundas o del propio sofá, tenemos que estar bien informados sobre los materiales con los que está fabricado nuestro sofá y, a ser posible, sobre las indicaciones del fabricante con respecto a su limpieza y cuidados. No es lo mismo limpiar un sofá de piel, que uno sintético o uno tapizado con tejido de algodón, por ejemplo. Si queremos utilizar productos específicos conviene que sepamos con qué tipo de telas y materiales estamos tratando. En algunos casos buena parte del sofá es desenfundable y se pueden lavar en la lavadora, en realidad esto sucede cada vez más, porque sin duda es más cómodo y, en consecuencia, más higiénico.

Para quitar el polvo

Lo primero y primordial es retirar el polvo y para que sea de la manera más fácil y rápida debemos hacerlo con un aspirador, revisando bien que aspiremos por todas las esquinas. Los aspiradores de mano son especialmente cómodos para esto un aspirador de mano como el de Cecotec de la foto sobre estas líneas vale 57,90 euros.

Limpieza a fondo

Una vez retirado el polvo llega el momento más delicado, el de la limpieza a fondo, haya o no haya manchas el sofá siempre estará algo manchado y lo notaremos especialmente cuando empecemos a limpiar y veamos como recupera su color y su brillo original. Esto podemos hacerlo con una esponja o una bayeta de microfibra humedecidas en agua y jabón, con un limpiador de vapor como el de Taurus, de la foto sobre estas líneas, que cuesta en Amazon 40,40 euros o con productos específicos para limpieza de sofás como puede ser el de Mercadona para tapicerías y alfombras.

Y si tienes mascotas

El tener mascotas o no no cambia mucho el procedimiento de limpieza, pero requiere que el aspirado fuese más exhaustivo, de hecho con mascotas conviene aspirar incluso las fundas antes de meterlas en la lavadora, aunque sean lavables. Desafortunadamente los pelos de las mascotas no caen de la tela al lavarla, hay que aspirarlos primero.

Acabado perfecto

Finalmente para un buen acabado, dependiendo del material con el que esté fabricado el sofá, hay opciones que pueden ser interesantes como abrillantadores para sofás de piel o sintético e impermeabilizadores para sofás tapizados que hacen además que se ensucien menos y que se mantengan limpios durante más tiempo y como nuevos.

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Nos ha inspirado

• Un limpiador de sofás sostenible en recipiente de 500 mL por 22,45 euros.

• Un limpiador a vapor de los más vendidos en Amazon por 42,99 euros.

• Un aspirador de mano de Black & Decker por 59,99 euros en Leroy Merlin.

• Un aspirador de mano de Cecotec por 47,90 euros.

• Un bote de 300 mL de limpiador para alfombras y tapicerías Omino Bianco por 15,20 euros.

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