Mis crisantemos tienen manchas amarillas: ¿Cómo puedo acabar con ellas?

Los crisantemos es una de las flores que más se utilizan en jardines, terrazas o incluso para dar color al otoño, ya que es una de las especies que florecen en esta estación de una forma espectacular. Son llamativas, muy fáciles de cuidar, y están disponibles en múltiples colores.

De hecho, sus flores salen en primavera y en otoño, y ofrecen una amplia variedad de formas que van desde las más simples como las margaritas, a las anémonas, pompones, tubulares...

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Problemas de los crisantemos

Cuidar a los crisantemos es bastante fácil. Es una planta que necesita el sol para florecer, así que es bueno colocarla en lugares soleados, y a ser posible, no hay que plantar los ejemplares demasiado juntos ya que aumenta de tamaño de forma importante.

Entre los problemas que pueden surgir en los crisantemos está la aparición de manchas amarillas o nervios marrones. Una de las causas puede ser la virosis del tomate. Si ves que que tu crisantemo tiene estos síntomas, lo mejor es que tires la planta de forma inmediata para evitar que contagie a otros ejemplares.

Si el crisantemo tiene puntos amarillos en el envés de la hoja, el problema tiene mejor solución, ya que se debe a la presencia de la mosca blanca, un insecto diminuto con alas que chupa la savia y que cuesta eliminar por estar en la parte inferior de las hojas y porque es resistente a muchos remedios.

Para eliminarla, lo mejor es utilizar jabón potásico y pulverizar mezclado con agua por las mañanas de arriba a abajo, para que el compuesto vaya cayendo y elimine a este insecto. También puedes aplicar aceite de Neem, Si utilizas este producto, debes tener en cuenta que es mejor aplicarlo al atardecer para que el sol no queme las hojas.

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