La poisenttia es una de las flores más demandadas por esta época para dar un toque navideño en muchos hogares. Pero si te cansa ya el rojo de todos los años, la Princettia es una estupenda solución. Esta especie, considerada la prima hermana de la Flor de Pascua, se diferencia sobre todo por el color de sus braceas, en
La llaman Estrella de Otoño, y da una alegría muy especial a cualquier estancia gracias a los colores de las brácteas
no le falta razón al calificativo. La Princettia es una de esas plantas que enamoran por su colorido e iluminan la estancia en la que se encuentran. sus cuidados son similares y su diferencia más que visible: la coloración de sus brácteas, en las que el rosa es protagonista, aunque también las hay en colores como el blanco.
Las hojas verdes son algo más pequeñas que las de la Poinsettia. Y además, es bastante más resistente; todos sabemos que muchas flores de Pascua roja, dependiendo de los cuidados y de las condiciones en las que vive, pero la Princettia es más fuerte.
Cómo cuidar la Princettia
La Princettia requiere unos cuidados muy similares a la Flor de Pascua de toda la vida. Donde está más a gusto es el en interior, aunque puede sobrevivir en el exterior siempre que no haga excesivo frío y sobre todo, que no sufra heladas. Si la tienes en interior, lo más recomendable es que la tengas a 20º, aunque puede llegar a aguantar hasta 25-25ºC. Por la noche, no es bueno que esté por debajo de los 16ºC.
En lo que respecta a la temperatura, hay que añadir que a la Princettia le sucede lo mismo que a la Poinsettias, no hay que ponerla cerca de la calefacción, y hay que evitar los ambientes secos. No tolera los cambios bruscos de temperatura, ni las corrientes de aire.
Además, esta planta necesita tener abundante iluminación para mantener el color de sus brácteas, y para que pueda llegar a florecer. Pero cuidado, que necesite mucha luz no significa que necesite sol directo, al contrario, hay que evitar que los rayos del sol directos.
Si ves que tu Princettia comienza a perder hojas, es una señal clara e inequívoca de que no está a gusto en el lugar donde la has puesto y que necesitas buscarle una nueva ubicación.
Tampoco hay que despistarse con el riego si quieres que la Princettia esté saludable. De hecho, no necesita demasiada agua. Puedes regarla cuando veas que el sustrato está seco; normalmente, con un par de veces a la semana, y hay que evitar encharcarla ya que las raíces se pudrirán y la planta morirá.
Tras la época de Navidad, la Princettia perderá su color. Después, para que la planta se mantenga y te regale de nuevo su colorido al siguiente invierno, es necesario que la mantengas varios meses totalmente a oscuras durante al menos 12 horas al día.
Fotografías | Parker Sturdivant en Unsplash, JackieLou DL en Pixabay
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