La búsqueda del bienestar a través de la decoración y la transformación de los espacios en un "hogar" han sido la esencia de este proyecto solidario llevado a cabo por la Escuela Madrileña de Decoración e Ikea en la intervención de un centro de mujeres maltratadas. Y es que la decoración tiene un poderoso componente emocional. Lo que un espacio es capacidad de transmitir, las sensaciones que nos produce, pueden tener un impacto muy grande en nuestro estado de ánimo.
Coincidiendo con el 30 aniversario de su fundación, las mujeres y niños, residentes en el Centro de Recuperación Atención y Recuperación de Mujeres Maltratadas (CARRMM) disfrutan a partir de ahora de espacios rediseñados con un mobiliario totalmente renovado.
La Escuela Madrileña e Ikea han puesto en marcha la iniciativa como reconocimiento a la labor del centro y para contribuir al bienestar de sus residentes. Así, juntos, han aunado conocimientos y recursos para rehabilitar y acondicionar cinco estancias de uso común pensadas para crear bienestar para estas mujeres.
El espacio Antes y las claves de su transformación
Para poder entender mejor la profunda transformación del espacio compartimos las imágenes del Antes.
La sala de cine Antes que ocupa el mismo lugar que ahora
Espacio que ahora ocupa la zona infantil y el cine
El proyecto que han llevado a cabo se ha basado en llenar los espacios que, aunque amueblados, se encontraban "vacíos" porque los muebles eran pocos y estaban mal dimensionados. Esto, unido a los materiales como el terrazo del suelo, el hormigón visto y especialmente el color oscuro de la madera daba como resultado espacios "fríos" y un tanto desangelados en el que además se echaba de menos un espacio dedicado a los niños.
El jefe de Estudios de la Escuela, Aitor Viteri, y una decena de alumnas han sido las responsables del proyecto que ha transformado cinco estancias; el hall, el salón, la zona infantil, una zona de cine y un jardín interior.
Para Viteri el gran reto ha sido "transformar el espacio en su parte emocional para crear un hogar". Para ello se han centrado en quitar el peso frío de los materiales para dar calidad de hogar, algo que han conseguido pintando de blanco la madera oscura de las barandilla y las puertas y sobre todo llenado el espacio de alfombras, de otros textiles y distintas texturas que enriquecen el espacio.
También se ha tenido muy en cuenta los usos reales de los espacios y las necesidades de las mujeres y niños.
Los espacios después de la intervención
Cada estancia se ha decorado para responder a unas necesidades concretas. Como señalaba Viteri, el salón principal de gran tamaño y muy abierto, es ahora un espacio para usar de forma compartida pero puede usarse de una manera mas recogida o íntima, gracias a las butacas de lectura. En este sentido la distribución de los sofás y las alfombras sirven también para delimitar o zonificar el gran espacio.
El jardín exterior es el sitio de reunión de las mujeres, al que no suelen acceder niños. Por eso se ha buscado una decoración más serena y relajada pero con toques de color en el que se ha cuidado mucho la iluminación. Las guirnaldas rodean los troncos de los árboles, y los farolillos se reparten por distintos puntos para crear una bonita atmósfera.
En cuanto al área infantil que se abre hacia la zona de televisión o cine, se ha llevado a cabo un trabajo divertido y muy funcional atendiendo a las distintas edades los menores del centro. De planta rectangular, se han dividido en diferentes zonas en forma de "U" gracias a las estanterías kallax, al no llevar trasera son un clásico para dividir espacios.
Al entrar te recibe una zona pensado para bebés y los niños mas pequeños. Con sofás, alfombras y y juguetes apropiados para su edad. A continuación se encuentra un espacio de juego para niños pequeños, luego otra diseñada para actividades creativas como pintar y por último la zona de los mayores. Sus paredes se han llenado con numerosos marcos que enmarcan los dibujos de los mas pequeños, como si fuera una galería de arte.
Al fondo de la sala se encuentra la zona de televisión o cine. Varios sofás Landskrona en verde claro han dispuesto como un cine, en paralelo para potenciar este efecto cine aunque si cambias la disposición de estos sofás, esta zona también se puede convertir en un agradable salón.
La directora de la Escuela Raquel Simón, ha expresado su satisfacción con el resultado porque "hemos conseguido plasmar en un centro sociosanitario como éste la vida de un hogar" . Raquel está convencida del poder transformador que ejerce sobre las personas la belleza y la decoración de los espacios en que habitan, de su capacidad de transmitir paz y bienestar. "Eso es lo que hemos pretendido, que las mujeres residentes sientan que hay un futuro mejor para ellas, que el poder de la belleza que les va a rodear a partir de hoy sea un puntal más en su recuperación”.
Con la premisa de que "Todos merecemos un verdadero hogar" este proyecto forma parte de la contribución social que Ikea está llevando en España con su campaña "Verdaderos hogares". Laura Escalante, del equipo de Sostenibilidad de IKEA señala en relación a este proyecto "esperamos aliviar la situación de estas mujeres y sus hijos e hijas, y crear bienestar en su día a día. Son espacios pensados para fomentar las relaciones, los momentos de disfrute y en el caso de los pequeños, la diversión y el crecimiento saludable"
Información vía Ikea. Imágenes Silvia Caballero.
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