La mente se nos va rápidamente al Caribe o Tailandia cuando pensamos en lugares paradisíacos, el hecho de que estén tan lejos, de tener que coger un avión y pasar tantas horas en él, a muchos nos echa un poco para atrás.
Cual ha sido mi sorpresa cuando he encontrado una opción al lado de casa, te propongo que nos vayamos de vacaciones al paraíso, al hotel Casa na Areia en Portugal, donde la playa entra literalmente hasta tu cabaña.
Se trata, sin duda, de un hotel muy especial, un complejo formado por cuatro cabañas, situado en las dunas de Comporta, uno de los entorno más hermosos de todo Portugal, cerca del río Sado frente a la orilla del mar, a una hora de Lisboa.
Lo que lo hace tan especial y a la vez paradisíaco es que el suelo de la cabaña prinicpal es de arena, el espacio común, donde hay el salón y el comedor. Una idea del estudio de arquitectura Aires Mateus, son los responsables de este idílico proyecto. Lo curioso es que Casa na Areia comenzó como un proyecto para una casa de fin de semana y acabó en un pequeño gran hotel.
Olvídate de tacones y sofisticaciones, es un hotel donde relajarse y desconectar, un espacio donde aislarte, sin televisión, internet, ni móviles ni fiestas. Poco hay que hacer más que descansar, reflexionar, nadar, leer, pasear y disfrutar de una buena compañía. Regresarás con las pilas cargadas de tus vacaciones.
Hay cuatro casas, dos hechas de madera y cañas y otras dos de hormigón blanco, las cuatro con unos hermosos techos de paja. La Casa 0 tiene una original sala de estar y comedor con suelo de arena; la casa 1 y 2: Dispone de una habitación con baño y la Casa 3 tiene dos habitaciones y dos baños.
Las casas se pueden utilizar de forma independiente o si vienes con familia y amigos puedes dejar las puertas abiertas y que los espacios se comuniquen entre ellos. Funciona como un hotel normal, donde te sirven el desayuno y te hacen la limpieza diaria. Además el hotel te proporciona cuatro bicicletas para tus paseos.
Lo que más me sorprende de este hotel es la ubicación con vistas a la playa y a un paisaje idílico, la arquitectura que está totalmente integrada en el paisaje y por supuesto la decoración. Los suelos de arena junto a unos sofás de estilo shabby chic ultra blancos, los baños totalmente minimalistas con un aspecto futurista que contrasta con el look neorústico de la cabaña y las hermosas cortinas de muselina en las puertas, entre muchos otros detalles más.
Podrás disfrutar de la comida de la región donde destaca el vino, el pescado fresco y los arroces, además de pasear por los bellos arrozales. El complejo está integrado en la Reserva Natural del río Sado, el hogar de una variada fauna silvestre, como flamencos, cigüeñas y delfines. Es uno de los mejores lugares en Portugal para la observación de aves.
Los precios no son precisamente baratos, tendré que esperar para una ocasión muy especial para ir. Durante la temporada alta, de junio a agosto, el precio de las habitaciones es de 600 euros por noche, con una estancia mínima de 7 días. Y durante la temporada baja, de septiembre a mayo, el precio es de 500 euros por noche, con una estancia mínima de 3 días.
Reservas | Hotel Casas na Areia Imágenes | Nelson Garrido, Álvaro Manso y Bernard Touillon Más información | Aires Mateus En Decoesfera | La casa de verano de los editores de Milk Magazine