Dado nuestro amor por la naturaleza y las plantas, no es de extrañar que nos haya enamorado a primera vista este precioso invernadero convertido en restaurante, pues permite comer disfrutando del paisaje exterior en todo su esplendor.
Situado en las afueras de Amsterdam, este viejo invernadero estaba abocado a ser demolido, pero el chef Gert Jan Hageman tuvo a bien hacerse con el y convertirlo así en un bonito e interesante restaurante. Incluso se sirve de las tierras aledañas para cultivar parte de los ingredientes que se sirven.
Como no podía ser de otra manera, el restaurante conserva la estructura original de invernadero, acompañada de una decoración de estilo industrial, que encaja a la perfección con la estructura de hierro negro que lo envuelve todo. El local está también salpicado por algunas plantas y árboles, para que no perdamos de vista sus orígenes.
El concepto de invernadero, como se puede ver en las fotografías, no deja de ser una especie de gran urna de cristal, por lo que en los meses más calurosos no debe ser lo idóneo. Eso sí, puede resultar tremendamente acogedor en los meses fríos, o incluso en las noches de verano.
Vía | Gardenista En Decoesfera | Cabaña Marconi, un restaurante entre encinas centenarias