Las ciudades están perdiendo la esencia. Dicen adiós a sus vecinos con la gentrificación, ven como se cierran comercios de toda la vida...
Por suerte, para todos los que echáis de menos la vida de antes, tenemos espacios como La Colmada. Un gastroespacio madrileño que es todo un homenaje a los colmados de toda la vida.
Un espacio que es mitad tienda, mitad bar, en el que podrás encontrar productos de toda la vida y ese ambiente de ultramarino de barrio que tanto nos gusta, pudiendo comprar por ejemplo embutidos, quesos, vinos o conservas...o tomarte unas tapas, unas tostadas (llamadas Colmadas, como no podía ser de otra manera) o una ensaladilla rusa con txaca y atún.
El espacio, diseñado por Ultramarina Studio, ocupa el lugar en el que abría sus puertas la Tetería de la Abuela. Realmente, y para mantener el sabor del local, la reforma no fue demasiado grande, manteniendo los dos espacios que existían.
La zona de la entrada, cuenta con un llamativo color azul que recuerda sin duda a los productos del mar. En cambio, la zona interior, está pintada en tonos verdes, haciendo un guiño a la naturaleza y al mundo rural.
En el ambiente de este gastroespacio de la calle Espíritu Santo de Madrid, además de los colores, y de la abundancia de conservas y de productos de calidad, destaca el suelo de baldosa hidráulica que por suerte se ha mantenido intacto pese al paso del tiempo, y la barra fabricada en mármol blanco Macael.
Más información | La Colmada | Ultramarina Studio
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