A la hora de elegir un hotel, aparte de bien decorado, ¿nos importa que sea sostenible?

Acabamos de volver de Semana Santa, ayer fue el Día de la Tierra y ya estamos preparando el puente de mayo. Creo que no puede haber mejor momento para cuestionarnos si, a la hora de elegir un hotel, aparte de bien decorado, nos importa de verdad que sea sostenible. Y es que mucho hablar de recicladecoración, mobiliario sostenible y eficiencia energética, pero a la hora de la verdad quizás en nuestra balanza pesen más otros aspectos.

Esta pregunta me viene rondando desde hace unos días, cuando asistí a un interesante encuentro sobre hoteles sostenibles organizado por Twenergy, la comunidad online de Endesa sobre eficiencia energética y sostenibilidad. Se celebró en el Meliá Me-Madrid, uno de los hoteles más eficientes de la capital, y asistieron medios relacionados y representantes de ITH, Instituto Tecnológico Hotelero, y Trip Advisor, como sabéis la mayor web de viajes del mundo. Pero comencemos descubriendo primero cómo es un hotel sostenible por dentro.

Así es el hotel sostenible por dentro

En esta interesante infografía, elaborada por Twenergy, se ha tomado como modelo el Me-Madrid, antiguo Gran Hotel Reina Victoria en la Plaza de Santa Ana, que ha implementado numerosas mejoras para convertirse en un hotel sostenible, pero evidentemente podría aplicarse a cualquier otro.

De la revitalización del histórico edificio se ocuparon el arquitecto Keith Hobbs y su equipo de United Designers, que lo renovaron y transformaron con el el objetivo de conservar la espléndida belleza de su arquitectura fundiéndola con el espíritu y la vanguardia de ME by Melia, a través de su mobiliario de diseño y fabricación exclusivas, sus accesorios eclécticos y sus innovadoras obras de arte.

Pero comencemos nuestro recorrido sostenible. Por fuera nos fijamos en el logo del hotel, que ha cambiado los neones por tecnología LED, las ventanas con acristalamiento doble y la iluminación de la fachada, optimizada también con LED. La iluminación de las zonas comunes ha sustituído 1037 bombillas halógenas por LED, consiguiendo una reducción anual de emisiones de 51 toneladas de CO2.

Ya en las habitaciones comprobamos que hay instalación domótica para el control de dispositivos, que cuenta con un sistema de climatización optimizado y que en la iluminación se han sustituído los tubos fluorescentes por tecnología LED. En el baño comprobamos los sistemas de ahorro, como los grifos con aireadores y las cisternas empotradas con doble descarga.

En las zonas que habitualmente no vemos, como las oficinas, cocinas y otras áreas de servicio se han tomado igualmente medidas de eficiencia, que continúan con la concienciación del personal e incluso del cliente, y que van más allá del típico cartelito de no cambiar toallas y sábanas para ahorrar agua.

¿Y esto de verdad nos importa a la hora de elegir?

Todo parece indicar que nuestra sociedad está cada vez más concienciada con el cuidado del medio ambiente. Recientes estudios concluyen que la ecosostenibilidad es cada día más importante para el 86% de los viajeros y para el 89% de los hosteleros españoles. En Trip Advisor, sin ir más lejos, ya distinguen a los alojamientos que incorporan prácticas sostenibles y yo misma me sorprendí ayer al leer que la Junta de Andalucía va a ser pionera en primar las medidas socioambientales a la hora de calificar los hoteles.

Pero, yo me pregunto, ¿de verdad nos importa que un hotel sea sostenible a la hora de reservar? Os pido vuestra opinión, al igual que hemos hecho en otras ocasiones, a la hora de preguntarnos el peso de la decoración. Apuesto a que nos llevamos sorpresas:

Más información | Tripadvisor, Meliá, Twenergy