Hace meses que llegaron estas sensacionales puertas a nuestras vidas. Al principio y sin estar reacios a ellas entendimos que simulaban grandes biombos fijados a la pared con margen movible, con ellas probamos a separar habitaciones y en viviendas de metros reducidos a convertir en más de una estancia un sólo espacio. En sus materiales de acero brillante y como no, en color negro, de aluminio o hierro se enmarcan cristales de gran anchura o largura que prometen zonas mucho más iluminadas. Estos son los siete motivos para apostar por unas puertas que desvisten la intimidad de los espacios colindantes y al mismo tiempo los respetan y embellecen.
1. Son actualidad decorativa en interiores
2. Nos encantan sus efectos y terminaciones
3. Originan paredes invisibles para separar estancias
La tendencia manda aunque hay casos en los que se rectifican los modelos sobre la idea principal para cubrir las necesidades de cada espacio. Los frentes fijos de cristal funcionan genial como galerías muy particulares que se prolongan con puertas correderas, abatibles e incluso plegables. Todo cambia según el espacio, el gusto y las medidas barajadas.
La única incompatibilidad que le hallamos a estos diseños es la falta de intimidad entre las estancias, sólo viendo estos resultados, a casi nadie le importa dejarla a un lado. Como apuesta certera, todos los diseños de puertas industriales de vidrio facilitan la entrada de luz natural, algo bastante interesante para el ahorro de energía. Tanto si sus perfiles son en acero plateado como todas estas que vemos en color negro tienen un fácil mantenimiento, además de existir opciones como cristales anti-huellas.
4. Reparten luz natural en interiorismos muy cuidados
5. Combinan con todos los estilos decorativos
6. Representan una alternativa contemporánea frente a las puertas tradicionales
7. Proporcionan profundidad visual en pequeñas zonas
Cristal opaco, espejos reflectantes, perfiles en acero, hierro o madera.
Otras versiones en este tipo de puertas son las acristaladas con efecto opaco, entra una luz más tenue sin prescindir del efecto industrial-cristal. Particularmente me atraen mucho más las primerizas negras y con vidrio translúcido. Lo que no estoy tan segura es si elegiría una apertura corredera o abatible, como habéis visto las dos opciones quedan fabulosas, además si eres algo indeciso siempre cabe la posibilidad de unir los dos conceptos en uno y crear una corredera plegable con estilo industrial muy de moda.
La madera es uno de los materiales con los que se ha probado desde un principio hasta llegar a esta tendencia, si decides apostar por ella, el resultado final será más cálido e igualmente conductor de la luz natural que tanto valoramos en interiores.
Fotos | IMemediterranea
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