Si ayer veíamos que este otoño volvían las flores, hoy quiero compartir con vosotros otra tendencia que marca la moda de otoño de manera determinante: los colores dorado y negro. Así leído puede parecer un poco kitch y trasnochado, e incluso recordaros a un club de carretera, pero os aseguro que los diseñadores se han puesto las pilas para dar a esta combinación un aire renovado y elegante.
Os propongo que os fijéis en la imagen que hay sobre estas líneas como ejemplo de lo que quiero decir. El negro está en las paredes y en la mesa, mientras que el dorado es la nota destacada tanto en el sofá, como en las cortinas como en los ribetes de las sillas. No consiste en hacer de vuestra casa un rincón rococó sino de unir distintos estilos con un color único.
Me llama la atención especialmente cómo se ha usado el gris como color-puente entre el dorado y el negro, tanto en telas como en tapicerías, con lo que se logra un espacio con mucha clase. Pero quiero que veáis más ejemplo, como el salón que tenéis bajo estas líneas, de venta en Portobello Street.
En este salón, que cuesta 3888 euros, podemos ver otro punto de vista de la combinación negro y oro sin perder nada de clase. El espejo rodeado de estrellas doradas contrasta con la sobriedad de la pared gris donde se apoya, mientras que los muebles con un tapizado parecido al que veíamos previamente, dan movimiento a la estancia. En este caso, se trata de butacas de caoba también ribeteadas en dorado. Todo un ejemplo para los que buscáis la mejor calidad sin importar el precio (y además que lo valen estas sillas).
Sobre estas líneas tenéis la interpretación de esta tendencia tal y como la ve BoConcept. Fijaos cómo todos los muebles y complementos del salón son negros para que el sofá dorado sea el centro de atención. Para mi casa, yo no apostaría por un look total tan arriesgado porque, si bien es verdad que el negro es un color elegante, no es menos cierto que hay un corolario de la Ley de Murphy que dice que lo feliz que eres con un mueble oscuro es inversamente proporcional a la de veces que le hayas quitado el polvo de encima (y os aseguro que yo era muy feliz cuando compré mi mueble del salón color wengué).
Tenéis que meter el negro y el dorado en vuestra agenda decorativa si queréis estar a la última este otoño, pero como siempre nuestro consejo es que apostéis por estos tonos en los complementos y en los objetos pequeños de decoración porque es fácil que la tendencia cambie (en primavera sin ir más lejos) y al final tendréis una casa pasada de moda y oscura. Me consta que por ejemplo en Zara Home tienen mantas que siguen esta tendencia por un precio ajustado y estoy segura de que en A Loja do Gato Preto también tienen cortinas y otros textiles, así que no tenéis excusa.
Imágenes vía | Apartment Therapy, Portobello Street, BoConcept En Decoesfera | El estampado floral sigue vivo también en otoño
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