Puertas abiertas: un loft dúplex abuhardillado lleno de personalidad

Sé que hay muchos lectores de Decoesfera que sueñan con vivir algún día en un loft. Mientras llega ese día os invito a soñar conmigo mientras recorremos casas como la que os traigo hoy, un loft de dos plantas con una disposición un tanto particular con 127 metros cuadrados en los que se ha usado el color blanco como base de la decoración.

Empezamos nuestro recorrido por el salón situado en la planta superior. Las paredes blancas solamente se ven interrumpidas por las vigas pintadas de color casi negro y que determinan la personalidad de este espacio que se completan con otros detalles negros como la chimenea y las alfombras.

Observad cómo partimos de un espacio en forma de L en el que se han creado dos zonas de tertulia separadas con sendos sofás grises. Una de ellas está montada en torno a una televisión y la otra zona en torno a una estantería de libros que constituyen el principal elemento decorativo de la zona. Me gusta mucho cómo los detalles de color provienen sobre todo de las plantas que se han colocado sabiamente para que ninguna zona quede sin su toque verde.

En la imagen superior podéis ver la cocina y el comedor, que están situadas en la planta baja de la casa. Observad cómo aquí seguimos teniendo las paredes de un blanco impoluto y cómo las plantas son las que crean los mayores acentos de color. La barra de desayuno ayuda a separar ambos ambientes con gran acierto aunque las paredes blancas nos siguen recordando que estamos ante un solo espacio.

En la parte de la cocina tenemos muebles bajos y en las estanterías se ha aprovechado para almacenar los objetos que más se usan en el día a día. Observad que, aunque los muebles no se sabe si son viejos o nuevos por su diseño atemporal, los electrodomésticos como la placa vitrocerámica o la nevera nos hablan de las últimas tendencias. Con esto vemos cómo no es difícil integrar dos corrientes decorativas si se hace con sobriedad. En la puerta que tenéis al lado de la placa está la lavadora y la secadora, como podéis ver en las imágenes de la galería.

La puerta que veis al lado del comedor da paso a un despacho en el que caben dos personas trabajando en sendos ordenadores. Los muebles vuelven a ser negros en este caso y el toque de color proviene de la alfombra que tenéis en el suelo. Me gusta cómo aquí han cambiado el panel motivador por un cable del que penden diferentes láminas, lo que le da a la estancia un toque de lo más personal.

Terminamos nuestro recorrido en el dormitorio principal en el que lo que más destaca es que por primera vez vemos una pared de ladrillo visto que se desmarca de las paredes blancas que hemos visto en el resto de la casa. La decoración aquí es de lo más simple, con un armario y dos mesillas que constituyen detalles de lo más minimalista. Me gusta mucho esta estancia porque tiene acceso directo a la terraza donde a buen seguro se pueden pasar algunas noches hablando antes de irse a dormir.

Imágenes vía | Alvhem Mäkleri En Decoesfera | Casas que inspiran: cuando el lujo es el espacio