Todos necesitamos tener un destornillador en casa (o unos cuantos) para resolver problemas frecuentes o montar algún mueble. Probablemente os habréis fijado en que algunos destornilladores tienen en el mango un orificio, en principio lo más lógico es pensar que sea para colgarlo pero puede tener otros usos tanto o más prácticos.
El orificio del destornillador para hacer palanca
Además de usar el agujero del mango del destornillador para colgar la herramienta en algún lugar, hay otra función que puede resultar mucho más útil.
Seguramente en más de una ocasión os habréis encontrado con algún tornillo que no se afloja por mucha fuerza que hagamos para girar la herramienta. Si eso sucede una solución puede ser insertar un segundo destornillador (u otra herramienta alargada) en el orificio de forma transversal y usarlo así como palanca.
Los tornillos atascados se pueden aflojar así más fácilmente: cuanto más larga sea la palanca, más fácil resultará, porque la longitud de la palanca multiplica el efecto de la fuerza. Seguro que a partir de ahora cuando volváis a comprar un destornillador mirareis si tiene se orificio transversal en el mango...
Consejos para usar el truco del orificio del destornillador
Con todo, para usar este truco hay que tomar ciertas precauciones, por ejemplo, si nos encontramos un tornillo oxidado no debemos aplicar demasiada fuerza porque corremos el riesgo de que rompa.
Si nos pasamos con la fuerza, pero aún así el tornillo no sale, también podríamos acabar deformando el material puede deformarse. En este caso, puede ser de utilidad poner un poco de aceite entre el tornillo y el material antes de girar para que deslice mejor.
Fotos | bluebudgie en Pixabay y Efraimstochter en Pixabay
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