Entre todo el colorido que este año nos invade puede ser algo indecisa la elección de los tonos para las diferentes zonas de nuestro hogar, pese a toda duda acertaremos de lleno con los colores que este cercano otoño son tendencia. Si centramos la decoracción en dormitorios infantiles, los azules y rosas suelen ser los colores más demandados. Hay que reconocer que entre ellos se han ido sucediendo los tonos grises o pardosos, junto con coloridos neutros combinados con rosas apastelados y celestes grisáceos que cambian el diseño clásico y encorsetado por otros estilos más actuales. Hoy el color verde y su extensa paleta de tonalidades es una de las propuestas otoñales para dormitorios infantiles.
Si seguimos pensando en desconectar, en crear un estilo casero muy a nuestro gusto sin olvidar tendencias y que aporte la sensación de evasión exterior y conexión con el interior. El color verde puede que os inspire. Las ilustraciones decorativas, que hasta ahora hemos visto en la temporada veraniega decide quedarse con nosotros, en textiles y papeles pintados. Os sugerimos incorpararlos en cojines, paredes, láminas y ropa de cama, en los que la vegetación está muy presente.
1. Tonalidades en paredes
Es cierto que los tonos verdes tienen sus admiradores y sus detractores, personalmente las tonalidades verdes en decoración son de mi gusto. Refrescan los ambientes y dónde una zona carece de sentido, con un toque verde, sea cual sea, cambia por completo el aspecto del espacio a decorar. Hoy, trataremos de poner un retoque de simbolismo natural y decorativo al color verde; el cual sin duda, es uno de los colores favoritos de muchas personas y está de actualidad, más allá del mobiliario.
El color de fondo en las paredes refleja la personalidad que queremos para una habitación infantil. En las imágenes se diferencian los tonos de verdes, sin parecido alguno entre ellos, son maravillosamente coordinables, con tonos crema, madera natural y blanco. Ideales para crear ambientes sutiles y relajados o estancias llenas de luminosidad.
2. Mobiliario coordinado
Un color atrevido y lleno de vivacidad es el verde Lima. Este color tuvo su espelendor hace algunas temporadas, actualmente regresa con nuevas formas y diseños en mobiliarios y rodeándose de paredes que absorven la viveza del color pistacho. Una de las novedades es superponer los verdes ante paredes oscuras, pintadas de color azul marino forman un contraste elegante y funcional. En la segunda imagen se logra una unión acertada con las rayas en la pared, sin ellas este espacio no sería el mismo. En determinadas ocasiones es mejor combinar el mobiliario en tonos neutros, normalmente en un dormitorio infantil, la madera natural o el color blanco son los básicos para después agregar colores secundarios.
3. Papel Pintado
Una vez más el papel en paredes triunfa, esta vez lo hace en dormitorios infantiles. Con ilustraciones mixtas os mostramos estos dos ambientes perfectamente aprovechados. El papel destaca entre un mobiliario de líneas rectas y otro con piezas auxiliares como el armario a juego en color menta.
4. Textiles verde agua
Si deseas darle un toque verde a la habitación infantil, a veces no hay porqué pintar paredes o elegir muebles que nos esclavicen a este color durante mucho tiempo. Sencillamente con complementos como cojines verde agua, lámparas, alfombras llamativas o cortinas, conseguirás ese efecto pudiendo jugar con un color neutro en el mobiliario. Se debe recordar que una habitación infantil no puede prescindir de la alegría y variedad en los colores hoy en día dispones de muchas opciones para satisfacer las distintas necesidades de cada espacio.
Los tonos verdes agua son manejables sobre todo como complementos, por su tonalidad suave aportan detalle y distinción en los ambientes infantiles. Es un color muy delicado que prolifera en decoración por su agradable tonalidad apastelada y neutra.
5. Alfombras imprescindibles
En la habitación de un niño !no deben faltar las alfombras! en verano aportan peso decorativo y para la temporada que llega son ideales para resguardarlos de la temperatura. Su uso para los niños es grato cuando juegan o se visten. El color verde es la alegría, frescura y el color de la vegetación, de lo natural y el resultado de mezclar el azul con el amarillo. Por lo cual una combinación fantástica para tener en cuenta en un dormitorio infantil.
Siendo muy variable la tonalidad según la luz natural que le dé, y aunque un dormitorio infantil tenga asignado otro color como potencial, atrévete a mezclar los rojos y rosas, con pinceladas de verde, con este truco se eleva el carisma del dormitorio y lo hace mucho más colorido y alegre.
6. Accesorios decorativos
Bajo este punto de vista las ideas en decoración para una habitación infantil son muy variadas, desde integrar cajas para juguetes con ruedas verdes hasta adornar una cómoda con un cojín cactus. Con estos complementos se crea una habitación optimista y animada.
7. Escritorios y pizarras
Dos en uno, una pizarra verde en los espacios infantiles es infalible, tanto para jugar, colorear o estudiar. Además del color que aporta, su diseño queda ideal expuesto sobre una pared, donde los niños pueden apuntar, escribir y desarrollar su creatividad. Sigue el juego de coordinados con una papelera y sillas a juego.
Tonos pistachos y limas renovados, verde invierno, verdes agua, verde palta y esmeraldas son nuestras divertidas propuestas, clásicas y contemporáneas que inspiran la vuelta al cole. Crea ambientes llenos de armonía y completos de sensaciones agradables junto con la amplia paleta de matices verdes.
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