La encuesta sobre la utilización del dormitorio ha llegado a su fin, ofreciendo unos resultados en los que vemos que la mayoría de los participantes utilizan esta estancia para algo más que dormir. Picardías aparte, una gran parte de los encuestados la utilizan para las más diversas actividades, trabajar con el portátil, leer, charlar, reunirse con la familia…
Aunque algunos de estos casos vienen dados por pura necesidad, no tanto por el deseo de hacerlo, ya que como bien apuntaban Cirep y Morthylla, cuando se vive en un piso compartido la habitación se convierte en un reino personal en el que aislarse para realizar las más variadas actividades, y esto hace ansiar en ocasiones una habitación solo para descansar.
Este tipo de convivencia tiene distintas peculiaridades que hacen que esto sea así, ya que los lazos que unen a los inquilinos son de distinto matiz y no se asemejan a la vida en familia, por lo que el dormitorio particular es un refugio muy valioso.
Solo un 18% cosideran su habitación como un templo del descanso al que únicamente acuden para dormir. Como ya comentamos anteriormente, esto es lo más adecuado para evitar trastornos del sueño: no relacionar el dormitorio con ninguna otra actividad que no sea el relax nocturno. Pero, como nos comentaba Zugspitz, la escasez de metros cuadrados hace que las habitaciones tiendan a ser espacios multifuncionales en los que poder jugar, trabajar, vestirse y recibir un masaje, una propuesta esta última de lo más sugestiva…
Un 26% utilizan el dormitorio también como lugar de lectura, una actividad que entre otras cosas, resulta muy relajante y puede ayudar a conciliar el sueño. Un modesto 4% no se decantan por ninguna de las tres opciones anteriores.
Y la mayoría, un 52% le dan un uso variado, como nos dijo Alexman98, no solo para dormir, sino para poder leer, oír música y charlar con amigos, e incluso poder ver la televisión y utilizar el ordenador puntualmente.
Gelenius va más allá y nos cuenta que su dormitorio da a una amplia terraza, de manera que en verano ambas estancias se convierten en un agradable punto de reunión.
La conclusión es bastante clara, ya sea por diversos condicionantes o por puro placer, el dormitorio va dejando de ser una habitación vestida solo con una cama y dos mesillas en la que solo descansar, para pasar a ser un espacio muy personal en el que desarrollar otras actividades. Esta tendencia se va notando cada vez más en las ofertas de los fabricantes de muebles y decoradores, que no dejan de proponer ideas en este sentido.
Muchas gracias a quienes habéis participado tanto en la votación como en los comentarios; comenzamos a trabajar en una nueva encuesta.
¿Qué será, será...?
En Decoesfera | Encuesta: el dormitorio ¿solo para dormir?, Encuestas
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