Nacho Viñau Ena
CoordinatorHay cocinas que parecen ancladas en otra época. Espacios donde los azulejos descoloridos conviven con encimeras que han perdido todo su brillo original, donde la falta de luz natural se suma a una distribución que ya no responde a cómo vivimos hoy. Son esas estancias funcionales pero sin alma, que cada mañana nos recuerdan con su aspecto apagado que necesitan una segunda oportunidad. Y lo mejor es que esa transformación no tiene por qué pasar por meterse en obras durante meses ni por vaciar la cuenta bancaria.
Porque a veces, con pequeños cambios, se puede conseguir un efecto completamente renovado. Modificar detalles puntuales, añadir color o texturas donde antes había monotonía, e incluso jugar con soluciones adhesivas permite actualizar la cocina sin tener que llamar a un albañil ni vaciar la cartera. Precisamente, en Leroy Merlin hemos fichado una de esas soluciones que permiten renovar por completo el aspecto de la cocina pero sin meternos en obras y de una forma muy económica.
Una solución rápida y con estilo
Para quienes buscan darle un aire nuevo a la cocina sin complicaciones, las pegatinas de mosaico Smart Tiles Morocco Agadir de Leroy Merlin son una opción práctica y atractiva. Se colocan directamente sobre los azulejos existentes, son resistentes a la humedad y al calor, y se pueden cortar para adaptarse a cualquier superficie, tanto en la cocina como en el baño.
Además, su formato de azulejo y su diseño azul se suma a la moda de revestir las paredes de cerámica, aunque de una forma más sencilla, rápida y económica. Por su diseño, permite aportar un toque de color moderno ideal para transformar la pared en un elemento decorativo protagonista.
La instalación es sencilla y rápida. Basta con limpiar bien la superficie, despegar el adhesivo y colocar los azulejos uno a uno. No se necesita ninguna herramienta especial ni conocimientos técnicos, y en pocas horas la cocina adquiere un aspecto totalmente renovado.
Otra ventaja es la flexibilidad del producto. Se pueden combinar varios diseños o crear un patrón personalizado, lo que permite adaptar la renovación al estilo de cada persona sin hacer obras. Además, si algún día quieres cambiar de estilo, los azulejos se retiran sin dañar la superficie original.
El mantenimiento también es cómodo. Al ser resistentes a la humedad y al calor, se limpian con un paño húmedo sin complicaciones, lo que los hace perfectos para zonas de salpicaduras como la encimera o la zona del fregadero. Así, además de decorar, aportan funcionalidad. Respecto al precio, estas baldosas adhesivas de Leroy Merlin cuestan 26,99 euros cada paquete.
Fotografías | Becca Tapert en Unsplash, Leroy Merlin
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