Las cocinas junto con los baños son las estancias que más delatan el paso del tiempo en una casa por eso, si consigues dar a la cocina un aspecto clásico atemporal, como en este caso, acertarás con la elección. Esta cocina con muebles negros y encimera de haya (ambos de Ikea) logra este efecto gracias en parte, a los muebles con moldura y sin brillo que combinan a la perfección con las luminarias de estilo industrial y con las paredes en crudo (sin tratar), que delatan el paso del tiempo de la vivienda (que data de 1880) .
Una cocina con muebles cien por cien Ikea que se sitúa en el apartamento de un pueblo cercano a Berlín donde Nora Eisermann y Laura Muthesius, estilistas de comida necesitaban encajar una cocina funcional y práctica sin renunciar al estilo.
Eligieron para conseguirlo el mobiliario de Ikea de LERHYTTAN para los muebles bajos de cocina, los tiradores metálicos clásicos, la encimera de haya y el lavabo que imita las pilas antiguas que junto al grifo Glittran también contribuyen a crear el efecto entre tradicional y rústico de la cocina.
El efecto industrial viene marcado por una de las paredes que se ha dejado sin tratar y muestra el aspecto original en el que se encontraba la cocina antes de la reforma, por los apliques de flexo en la pared, la lámpara industrial de la cocina y las estanterias metálicas modulares.
Una cocina cuyo resultado final se convierte en el escenario perfecto para fotografiar los platos que nos enseñan en su blog Our Foodies Stories.
Vía Remodelista