En la cultura japonesa el valor de la estética tiene tanta importancia, que es parte de la vida misma de todas y todos. La arquitectura y la decoración de interiores tiene por supuesto sus códigos y estilos definidos que revelan una cultura por el detalle. En este microcosmos estético insular, existe una tendencia ancestral que quizás no conocemos en occidente. Se trata de estilo estético Wabi.
El wabi se caracteriza por ser un estilo "imperfecto" que quiere estar muy ligado a la naturaleza y a lo rústico. A diferencia del minimalismo habitual que conocemos, el wabi agrega un componente cálido con colores y texturas que nos recuerdan a la naturaleza que nos rodea. Es con esta idea en mente que el diseñador belga Axel Vervoordl junto con el arquitecto japonés Tatsuro Miki crearon el Tribeca Penthouse.
El proyecto Tribeca penthouse, es parte de las propuestas del Hotel Greenwich propiedad del actor Robert De Niro junto con el inversionista Ira Drukier. Cabe recordar que la zona de Tribeca en Nueva York ha sido en gran parte rescatada del abandono a través de proyectos llevados por De Niro. Es en este contexto general que nace la idea de ofrecer un espacio exclusivo y diferente con este apartamento fuera de lo común.
El apartamento ubicado en la cima del hotel Greenwich se extiende sobre una superficie de 630 metros cuadrados y es una fusión entre el pasado industrial del barrio de Tribeca con el estilo decorativo japonés Wabi. El apartamento cuenta con salón, comedor, tres dormitorios, tres y medio baños y terrazas con piscina. La decoración interior tiene una fuerte tendencia orgánica con mucha madera, piedra o concreto aparente.
Los muebles son una mezcla de piezas antiguas con otras hechas a la medida para este espacio. Resaltan por ejemplo una mesa de centro para el salón hecha con tablas de madera rustica sin pulir, tal y como la podríamos encontrar en un lugar abandonado. La mayoría de los materiales utilizados para el mobiliario no son nobles ni de gran valor "per se" pero le dan el espacio con mucha personalidad.
La chimenea central es de piedra, lo que le da un aspecto muy rudimentario a un salón amplio y lleno de luz. Así mismo cada espacio cuenta con una luz y una gama de colores bien definidos lo que crea ambientes muy distintos entre si. Me impresiona la manera con la que se ha logrado crear una atmósfera muy cálida aun en espacios con poca luz como los dormitorios o los baños.
Hay que reconocer sin embargo que, por muy espectacular que parezca, el estilo bastante ecléctico del Tribeca Penthouse puede llegar a ser impresionante en primera instancia. Para evitar esto, y crear un conjunto agradable, se han dejado espacios que, sin perder su esencia industrial tendencia wabi, son más tradicionales con muebles y colores más habituales.
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