En la arquitectura, la luz juega un papel tan importante como los planos, las líneas y los materiales. Ha habido grandes arquitectos que han sabido jugar con ella, a la cabeza de los cuales está Tadao Ando. En el estudio Betillon / Dorval-bory también saben usar la luz como articuladora de espacios en este pequeño apartamento parisino.
Por amigos que viven en la capital francesa, sé que es una ciudad muy dada a auténticos minipisos, en la que cada rincón de antiguos edificios se convierte en una vivienda en miniatura que sólo los más avezados e ingeniosos son capaces de transformar en un espacio realmente habitable.
Este minúsculo apartamento era originalmente un piso con dos pequeñas piezas, cuya mayor virtud eran dos grandes ventanales que iluminaban cada una de las estancias. La primera decisión de los diseñadores fue convertir estos dos mini espacios en uno solo, pero tratando de crear diferentes zonas a través de un sistema de luz artificial.
De esta manera, la zona de día, en la que el mayor protagonismo lo tiene la barra de la cocina, está iluminada por una serie de fluorescentes blancos, mientras que la zona más privada, compuesta por el baño (ducha y lavabo, el inodoro está aparte en un rincón de la entrada) y una cama en un altillo, utiliza una iluminación mucho más cálida.
Con este juego de luces se consigue diferenciar ambas estancias sin tener que recurrir a un tabique que las separe completamente, aportando así una mayor sensación de amplitud en una vivienda que de otra manera resultaría angosta y angustiosa, si se me permite la aliteración.
Es cierto que al espacio parecen faltarle básicos como una zona de almacenaje --aunque fuera minimalista-- porque no se ve en ningún sitio dónde guardan la ropa, los libros o incluso las toallas del baño, y que tampoco hay una zona de salón propiamente dicha --sí de comedor, con una mesa y dos sillas-- pero no es menos cierto que se ha logrado transformar en una vivienda armoniosa y muy agradable lo que antes no era más que un cuchitril.
Además del magnífico trabajo con la iluminación, también me gustaría destacar lo bien ejecutada que está la gran barra que organiza el apartamento, primero como zona de cocina, luego como rellano de la escalera para subir a la cama y por último como repisa para el lavabo en el baño. Se ha cuidado en todo momento la continuidad del plano, lo que realza su longitud y también colabora a que el espacio se perciba mayor.
Os dejo con una galería de imágenes en la que se puede ver los planos del antes y el después de este pequeño apartamento parisino en el que la luz juega un papel esencial, así como el estudio previo realizado sobre la iluminación, el estado anterior de la vivienda y algunos detalles más sobre las lámparas utilizadas y los distintos ambientes que se pueden crear con ellas.
Ver galería completa » La luz como articuladora de espacios en este pequeño apartamento parisino (7 fotos)
Vía | Designboom Más información | Betillon / Dorval-bory En Decoesfera | Unificando espacios gracias al buen uso de la madera