Paisajes imaginarios (II)

Sin duda un comedor realmente agradable. Forja en la lámpara y las sillas, tonos amarillos y grises bien combinados y ese paisaje azulado, profundo y nevado al fondo que, incluso, parece elegido a propósito para coordinar con el interior.

Claro que el título del post ya le corta las alas a la adivinanza. Y es que, sí, es un paisaje imaginario, totalmente elegido a propósito. Se trata de un film electrostático para cristales destinado a ocultar vistas poco agradables, en la misma línea de los que habíamos visto anteriormente por aquí, como los de diseño escandinavo o los esmerilados.

La verdad es que la diferencia con las vistas reales es verdaderamente increíble.

En contra de lo que pudiera parecer dejan pasar la luz y además son muy sencillos de colocar, como podemos apreciar en este video.

Claro que nada es perfecto. Cuestan, ahora que están rebajados, aproximadamente 30 euros pero sólo tenemos tres modelos para elegir: dos de montañas y uno de una cascada. No muy sencillos de conjugar con una decoración de andar por casa. Queremos más modelos.

Más información | Windowfilmworld
En Decoesfera | Vistas al campo por 3 euros