O desenfundables, según se mire. Con esta propuesta de La Redoute podrás cambiar de cabecero con cada nueva temporada, o siempre que te apetezca. Se trata de una estructura de pino macizo, que se coloca entre la pared y el somier, recubierta de espuma de poliuretano y de una tela de algodón de color crudo. El conjunto tiene un grosor de 10cm. y una altura de 95/150cm, con anchos varían desde 90 a 160.
La idea se puede copiar para hacerla uno mismo, pero sinceramente no creo que valga la pena el trajín ya que cuestan desde 174,90 euros.
Las fundas se venden por separado, también a buen precio, desde 18,50 euros. Podemos encontrar estampados imitación tela de Jouy, que nunca pasa de moda, en diferentes colores, como el modelo Virginie que vemos a continuación.
Igualmente hay opciones en liso fáciles de combinar, como el Dark de la imagen de abajo disponible en tres colores: chocolate, beige y blanco.
Es de loneta de algodón y tienes también disponible la ropa de cama a juego. Incluso el cubresomier, con un bolsillo para guardar el reproductor de música o los libros. Cuesta desde 23,20 euros.
Las fundas sí que me parecen mejor para copiar, no tanto por el precio sino porque así podrás usar la tela que más te guste y tener tu propio cabecero personalizado. Puedes comprarte una funda, deshacerla y utilizarla como patrón para hacer todas las que quieras. Más o menos como las fundas diferentes para los sofás de Ikea de Bemz. Igual es una buena idea para emprender.
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