Algunos de sus diseños pueden sonar a dejá vù, y es que inevitablemente recuerdan a algunos de los estampados de las últimas colecciones de los reyes del "hágalo usted mismo" suecos, pero lo único que tienen que ver unos con otros es la nacionalidad. Bantie es la casa que firma estos tejidos alegres y llenos de energía positiva, dinámicos y versátiles, pues no se ciñen únicamente a la venta por metros, sino que revolucionan con su colorido lámparas, manteles, cuadernos y bolsos entre otros complementos, llegando hasta las camisetas infantiles.
En su página web podemos ver como a partir de ocho estampados diferentes y sus distintas tintadas, recrean todo un mundo de fantasía, en el que los cojines de patchwork son la máxima expresión de la mezcolanza. Todo esto bajo un simpático manifiesto en el que vuelcan sus deseos y objetivos, entre los cuales se destacan: también los minimalistas necesitan un cojín divertido o la experiencia es importante, pero el niño que hay en su interior lo es más.
En su catálogo, además de la riqueza de formas y diseños de sus cojines, llaman la atención los detalles; el que más me ha gustado es el que combina sus papeles pintados con las muñecas japonesas, que son las principales protagonistas de su estampado y que también se pueden adquirir en su web para achucharlas o simplemente ofrecer una decoración coordinada.
Los cojines derrochan diferentes formas e incluso se visten con pequeños madroños que ribetean algunos de sus diseños. Las lámparas están hechas con la intención de que iluminen aún apagadas con sus alegres colores, y los cuadernos rizan el rizo, pudiendo coordinar los artículos de escritura con el resto de la decoración.
Vía | Una Mosca en la Luna Más información | Bantie En Decoesfera | Barroco y rococó en los textiles