Las bañeras antiguas están de actualidad, ya sea renovadas en nuevos diseños que las toman como inspiración, o en piezas recuperadas, estas últimas muy cotizadas según su estado de conservación. Hoy vemos una forma algo gamberra de darles la vuelta y convertirlos en sofás, pero no unos asientos cualquiera, ya que han tenido la idea de darles el cambiazo para llenarlos de colores con un aspecto entre pop y kistch.
Las bañeras están cortadas solo en uno de sus lados, conservando las patas originales, y dejando espacio para poner una colchoneta hecha a medida. Estas, de atrevidos estampados, y los cojines que acolchan el incómodo respaldo, son los encargados de dar ese divertido toque de locura. Las piezas son originales de los años 1800 y 1900, y cada una de ellas es única, realizada generalmente por encargo.
Si disponéis de una de estas bañeras podéis emular este estilo, cuidando de realizar la operación con las herramientas adecuadas. Tengo que confesar que a mí me da mucha pena verlas cortadas, ya que aunque se conviertan en muebles únicos, no dejan de ser unas joyas decorativas en estado original. El precio de cada uno de estos sofás es de algo más de mil euros al cambio.
Vía | Apartment Therapy Más información | Etsy En Decoesfera | Una buena idea: viejos azulejos como posavasos
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