A veces, viendo esos típicos interiores de revista que tanto nos gustan, nos preguntamos cómo de difícil habrá sido llegar hasta ese resultado, o como sería antes. Es por eso que nos encantan los antes y después, pues permiten ver en detalle cada cambio.
Concretamente en este vais a poder comprobar como se ha pasado de un salón más bien insulso a uno de revista añadiendo algunos elementos y cambiando otros, aunque dejando la distribución tal cual estaba, algo que permite disfrutar aún más la evolución.
Si bien es cierto que en la mayoría de los antes y después --como ya ha comentado nuestro compañero Minue en alguna ocasión-- se usa el truco de hacer una fotografía mediocre para el antes y una muy cuidada y espectacular para el después, en este caso veréis que el cambio es notable. Aunque el truco de la fotografía también se ha usado, claro.

Sobre estas lineas podéis ver el resultado. Coincidiréis con nosotros en que el cambio ha sido espectacular, y que sin duda se ha pasado de un salón normalito sin mucha gracia a un auténtico salón de revista, perfectamente decorado y equilibrado en sus elementos.
Como veréis no se ha escatimado en plantas. Siempre hemos dicho que las plantas son un recurso genial para decorar cualquier estancia, puesto que por un módico precio puedes decorar un gran espacio. Y eso es precisamente lo primero que llama la atención en este renovado salón, las numerosas plantas que se han colocado. Concretamente las del fondo se han convertido en las protagonistas de la estancia, sin duda.

De hecho, como podéis ver en esta fotografía, lo que se ha hecho ha sido colocar un banco bajo la ventana, y sobre este se han colocado las diferentes plantas, creando un contraste con la luz muy interesante. Además se ha cuidado mucho el estilo de los maceteros, algo sumamente importante. Porque, imaginaos las mismas plantas en los típicos maceteros marrones de plástico. No, no sería lo mismo.

Otro de los principales cambios que más llaman la atención en este salón es el sofá. Lo cierto es que era oscuro y de estilo más bien clásico, así que se ha tapizado en un bonito y llamativo color turquesa. En nuestra opinión ha sido todo un acierto.

Resumiendo se podría decir que se ha optado por dejar las paredes y las cortinas en colores claros, como al principio, para seguir aprovechando la luz natural que entra por las ventanas, y la renovación se ha basado en darle colorido al mobiliario y los accesorios. A nosotros nos ha encantado el resultado, ¿y a vosotros?
Vía | Emily Henderson En Decoesfera | Un salón gris convertido en un salón ecléctico con pata de gallo
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3 comentarios
jacawitz
Me gustan los colores, pero creo que está algo sobrecargado para mi gusto, demasiadas plantas. Por otro lado, en el antes justamente le falta algunas plantas para dar vida.
Obviamente está trabajado para que el antes se vea desastroso (¿Una Mac en el piso?, ¿Una piñata en la ventana?), y la iluminación no pudo ser peor. Por lo menos debieron disimular un poco que fotografiaron el antes de la peor manera posible.
Morthylla
Me parece que tenían demasiada confianza en que el "antes" no era un desastre, de allí que intentaran afear la estancia con una foto terrible. Pero ni el antes necesitaba ser afeado más para justificar el cambio, ni el después es perfecto.
El principal problema que le veo al antes es un error muy común: toda la decoración aparece en la parte baja. La lámpara casi no se ve, por la luz y el que el color es el mismo de las paredes. En el después, la estantería de la esquina y las plantas altas hacen la habitación mucho más equilibrada y le quita ese aire de "vivimos aquí por un rato, no ponemos nada en las paredes porque nos vamos pronto".
Y desde luego, el después está muy sobrecargado. Todos esos pufs compiten por la atención con las plantas.
lectora-
¿Se imaginan todos estos muebles a la hora de limpiar? Supongo que no se ha pensado si habrían niños por medio. Estamos diciendo que más es menos y nos ponen silloncitos, mesillas y cacharros a los que hay que quitar el polvo?. No me gustan tantas cosas en una habitación tan transitada. Lo siento, queda bonito como foto de revista, como idea, pero no me lo imagino en mi casa.