Con la llegada del otoño y el descenso progresivo de las temperaturas, el hogar se convierte en nuestro refugio más íntimo y personal. Más allá del confort térmico, buscamos ambientes acogedores, cálidos y privados. En este contexto, las cortinas no son solo un elemento decorativo, sino que pueden ser grandes aliadas para aislar del frío y mejorar la intimidad de nuestros espacios.
Pero no solo es suficiente buscar una cortina térmica que nos aísle la casa del frío, sino otras opciones o alternativas que también pueden quedar muy monas y hacen de nuestro salón el paraíso térmico que siempre quisimos. A continuación te contamos las posibles combinaciones de tejillos y detalles que aumenten el confort y la efectividad en casa pero sin sacrificar el diseño de un buen salón.
Aislamiento térmico con estilo
No todas las cortinas cumplen la misma función. Si bien cualquier tela puede aportar una mínima barrera contra el frío, existen opciones diseñadas específicamente para ofrecer aislamiento térmico. Las cortinas térmicas están confeccionadas con tejidos más gruesos o con capas adicionales —como forros de poliéster, PVC o espuma aislante— que ayudan a mantener el calor en el interior durante los meses más fríos.
Una de las opciones más efectivas son las cortinas blackout térmicas, que además de bloquear la entrada de luz exterior, crean una barrera contra corrientes de aire y pérdida de calor. Perfectas para dormitorios y estancias con orientación norte, donde el frío suele sentirse con más intensidad.
Materiales que abrigan y decoran
El terciopelo vuelve a estar en tendencia, y no solo por su elegancia atemporal. Es un tejido pesado, denso y con cuerpo, ideal para crear una atmósfera sofisticada mientras ayuda a conservar el calor. Lo mismo ocurre con las mezclas de lana, que aportan una textura cálida y acogedora, perfecta para salones o espacios de lectura.
Si prefieres una estética más ligera, las cortinas dobles son una solución muy práctica: una capa más liviana (como lino o algodón) para el día, y una capa gruesa (como jacquard o blackout) para las noches frías. De este modo, puedes regular la luz, la temperatura y la privacidad según el momento del día.
Privacidad garantizada sin perder estilo
Cuando hablamos de intimidad, las cortinas juegan un papel fundamental, sobre todo en viviendas a pie de calle o con vecinos cercanos. Las telas opacas y de tonos oscuros garantizan privacidad total, mientras que los colores neutros o claros en tejidos más pesados ofrecen un equilibrio entre resguardo y luminosidad.
Una opción muy demandada en los últimos años son los estores enrollables térmicos, que permiten un alto control de la luz y una estética más minimalista. Al estar muy pegados a la ventana, refuerzan la eficiencia térmica y aportan discreción sin recargar el ambiente.
Consejos a tener en cuenta antes de elegir las cortinas
- Mide bien tus ventanas. Asegúrate de que la cortina cubra completamente el marco para evitar filtraciones de aire.
- Elige rieles o barras resistentes. Los tejidos térmicos suelen ser más pesados, por lo que necesitarás un sistema de sujeción firme.
- No descuides la estética. Combina colores, texturas y estilos con el resto de la decoración para mantener la armonía del espacio.
- Considera la orientación de tu casa. Si tienes grandes ventanales al sur, prioriza el aislamiento; si están orientados al este o al oeste, puedes optar por tejidos mixtos que también filtren la luz solar.
Fotografía de portada | Vía @annastathakiphoto
En Decoesfera | Lo nuevo de Ikea es una mesa de alas desplegables que ahorra espacio en la cocina o en el salón
En Decoesfera | El carrito de cocina más vendido de Ikea: sirve como isla y como mesa auxiliar para tus cenas
En Decoesfera | El mueble de Ikea que arrasa en ventas: multiusos y perfecto para espacios reducidos
Ver 0 comentarios