Para decorar un espacio infantil los mayores tenemos que hacer un esfuerzo extra porque no se trata de decorar para nosotros, se trata de decorar para los niños que son los que realmente tienen que sentirse cómodos y disfrutar en su espacio. Sin embargo siempre se puede buscar el equilibrio para que una escuela infantil sea buena para los niños y también para los adultos que trabajan en ella.
Las imágenes de este artículo corresponden a la escuela de educación infantil Zallako Haurreskola, situada en Aranguren en Bizkaia. Es una escuela de educación infantil de estilo nórdico, para niños de 0 a 2 años, que diseñó Sube Susaeta Interiorismo en 2012 y que se inauguró a principios del año pasado. Me ha encantado su estilo y tiene varios detalles que os pueden inspirar a la hora de decorar espacios para niños.
Se trata de una instalación con unas necesidades muy específicas. Hay que tener en cuenta, por ejemplo, que los niños no pueden quedarse solos ni un minuto, es por ello que se colocaron mamparas de cristal, para facilitar el cuidado de los pequeños desde cualquier lugar de la escuela.
La rotulación interior se cuidó mucho a nivel decorativo y funcional, para decorar de una forma bonita, pero al mismo tiempo mantener la máxima visibilidad desde la estancia contigua. En algunas de las estancias se añadieron cortinas para situaciones en las que interese lograr una mayor privacidad, pero siempre hay la opción de mantenerlas abiertas para ver, todas las paredes están acristaladas desde cierta altura.
Además la escuela tiene detalles decorativos fantásticos como las lámparas de diseño, cuyo detalle podéis ver en la foto sobre estas líneas. A mi me recuerdan a gotas de agua, su forma orgánica, combinada con los colores de la naturaleza, que están muy presentes en buena parte de los espacios de la guardaría, proporcionan un conjunto muy agradable.
En este proyecto todo está pensado para garantizar el bienestar de los niños. Hay suelo radiante en toda la instalación, los techos son fonoabsorbentes y no hay esquinas, además de la cuidada iluminación de la que también hemos hablado anteriormente.
Los colores son alegres pero no llegan al nivel de estridencia que caracteriza a otros espacios para niños. En realidad está bien elegir colores variados, cálidos y bonitos, a los niños no les va a gustar que todo sea blanco por muy cuqui que resulte, pero tampoco hay que pasarse con la intensidad y aquí han elegido los tonos perfectos.
Y otro detalle interesante es que a la hora de diseñar e instalar el mobiliario también se ha pensado en los más pequeños y en su estatura. Es obvio que los niños no pueden llegar a las cosas que están a la altura de los mayores, o tal vez sí, al menos a algunas de ellas si les colocamos una escalera.
Aquí las escaleras para acceder, por ejemplo, a los cambiadores, están en el interior de los muebles bajos y son extraíbles. De manera que se pueden sacar cuando se quiera, pero también se pueden ocultar para que los niños no puedan usarlas sin supervisión, evitando así peligros innecesarios. Todo muy bien pensado, ¿no creéis?
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