Desde pequeño siempre me han gustado las casas de muñecas, aunque pronto empezaron a parecerme demasiado clásicas. Todas parecían seguir el mismo patrón de mansión victoriana que no es que esté mal, pero que no hace más que ahondar más aún en los tópicos asociados a lo que debe ser una casa. Por eso me encanta esta casa de muñecas inspirada en Arne Jacobsen, porque ayuda a los más pequeños a entender que no todas las casas tienen tejados a dos aguas y chimenea a un lado.
En realidad, se trata de una réplica a escala de la casa del arquitecto en Charlottenlun (Dinamarca), que podríamos situar en los albores del movimiento moderno. Una casa unifamiliar de dos plantas con volúmenes sencillos, lineas rectas y grandes ventanales sobre fachadas planas de color blanco.
Como es lógico, la casa se puede desmontar para acceder a su interior, que está decorado con mobiliario diseñado por Jacobsen, como el sillón Cisne (Swan) o la silla número 7 entre otros. Sus creadores, los daneses de Minimii, también han diseñado una versión más pequeña que se puede colgar y ocupa la mitad de espacio, aunque ya puestos, me quedaría con la grande.
Vía | Design Milk Más información | Minimii En Decoesfera | Una casa de muñecas de estilo victoriano