No hay duda de que se trata de una buena idea, divertida e ideal para que cada persona decore la silla a su gusto, podemos dejar la madera sin vestir, pero los agujeros en su respaldo, similares a los de los tapices que yo bordaba en el colegio cuando era pequeña, salvando las distancias... permiten decorar con lana de colores a gusto del consumidor.
Y aún mas, ya que la lana se puede cambiar cada cierto tiempo, por ejemplo en los cambios de estación, si ahora que estamos casi en verano nos apetecen más los colores alegres y luminosos, cuando vuelvan las estaciones frías, volveremos con el gris y con los marrones y en ese momento podremos cambiar el 'bordado' de la silla, para adaptarla a los tonos de moda en la nueva estación.
Incluso si en casa queremos cambiarla de habitación, podremos cambiar la lana que la decora para que haga juego con el resto de los muebles de la estancia, con las cortinas, las colchas o las alfombras. Por ejemplo con tonos más alegres y divertidos si es para la habitación de los niños o con tonos más neutros si es para un espacio de adultos. Y no solo se puede decorar con lana, también con cuerda o con lazos... Parece muy versátil y puede dar mucho juego.
Vía | Stilsucht Más información | Susanne Westphal En Decoesfera | Hemos visto... una silla tapizada con abalorios