Parece que por fin se ha acabado esta primavera larga y lluviosa y vamos entrando en la estación veraniega. Nuestra casa está ya casi a punto pero nos topamos con esos invitados no deseados que llegan siempre en esta época del año: los mosquitos. Llenar toda la casa de insecticida no siempre es la mejor solución, debido a la cantidad de químicos que contienen y porque no siempre el olor es agradable.
Yo en estos casos recurro a la sabiduría de las abuelas y me decanto por una romántica mosquitera sobre mi cama. Una mosquitera de gasa le dará a la habitación ese toque romántico que andas buscando y además mantendrá apartados a los insectos durante las noches pero sin tener que renunciar a abrir la ventana. Si no tienes espíritu romántico, también puedes usarlas para dar un toque oriental, y transportarte a Delhi sin salir de tu habitación.
Las posibilidades son infinitas y están en función de tu presupuesto o de tu imaginación. Existen en el mercado varias soluciones, desde los doseles de Ikea, que cuestan en torno a los 15 euros hasta otras más elaboradas como las que se pueden adquirir en L'arbre de les hamaques. Si eres más tradicional, puedes decantarte por la típica mosquitera blanca, pero si te atreves, puedes elegir otros colores o incluso con bordados.
Es sencillo fabricar tu propia mosquitera si te sientes manitas, con tan solo tela de gasa y un gancho para colgarla del techo sobre la cama. ¿O te vas a pasar otro verano acribillado por los mosquitos?
Imagen vía | Desire to Inspire En Decoesfera | Especial Verano 2008