Nunca he sido muy devoto de las clásicas habitaciones infantiles y juveniles, con esos mega-muebles multiuso; mesa, armario y cama todo en uno, cuyo deseo es sacar el máximo partido al espacio. Pero también encontramos ejemplos como esta habitación para una muñeca, que demuestran que se pueden hacer las cosas bien.
Esta delicada habitación con reminiscencias de casa de muñecas, la han diseñado Heidi y Thomas para su hija. Tiene todo lo que una niña puede desear, como un pequeño vestidor, una zona de trabajo estilo camerino de artista y una cama en lo alto del castillo, a la que se accede por una ingeniosa escalera estantería.
Muy acertada la combinación de colores y materiales; claros y neutros en los muebles con una decoración mucho más atrevida en los habitáculos bajo la cama. Especial mención al llamativo papel que decora las paredes del fondo. Para quitarse el sobrero.
Vía | SwissMiss
Imágenes | Knaehojkarse
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