Hace tiempo no se nos hubiera ocurrido que existiera otro color que el rosa para el dormitorio de las niñas. Era imperativo tradicional que los dormitorios infantiles fueran rosa para las niñas y azul para de los chicos. Luego había madres más prácticas que usaban tonos neutros y cambiaban las cintas de las cunas y edredones (mi madre era de esas), pero los lazos seguían siendo azul y rosa.
Sin embargo, de un tiempo a esta parte, veo que además de haber aprendido la lección y buscar tonos neutros como base: toda la gama de blancos, beige e incluso topo, el clásico rosa se ha convertido en lavanda.
Tenemos edredones, boutis y colchas en tonos lavanda suave, lilas empolvados e incluso llegando casi, casi morado, pero sólo detalles, ya que en los dormitorios de los bebés y niños pequeños (y no tan pequeños) es preferible una decoración minimalista, en tonos suaves para que descansen mejor.
Patchwork (o imitación de pachwork) flores estilo Liberty, lisos, rayas, cuadros de vichy, pero siempre en esos tonos. Lo que resulta más dificil a día de hoy es encontrar el tradicional "rosa bebé". Acaso el lavanda se ha convertido en "el nuevo rosa".
Imágenes | Pottery Barn
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