Cuando era niña me encantaba la idea de hacer acampadas. Dormir en una tienda de campaña o al aire libre siempre tiene ese componente romántico y aventurero que les gusta a todos los niños. Por eso cuando he visto la imagen que encabeza este post, en la que han instalado la cama en el jardín dentro de una tienda, me he enamorado.
La idea es bastante simple aunque de aplicación complicada: los dueños de este jardín han colocado una cama dentro de una tienda de campaña y por lo que se ve desde fuera incluso han amueblado la tienda. No falta ningún detalle en este dormitorio portátil: lámparas, alfombras e incluso una descalzadora que harán que el que duerma ahí no sienta que está en una estructura temporal.
Como imagináis, para poder ejecutar esta idea vais a tener que trasladar muchos de los elementos de vuestro dormitorio dentro de la tienda de campaña que tendríais que haber medido antes para comprobar que cabe todo. Lo malo es la mudanza tanto en otoño como cuando empieza el verano y lo bueno es que pasaréis unas noches fresquitas.
Os guste o no la idea, la verdad es que está ejecutada con suma elegancia y te hace olvidarte de que estás en una tienda de campaña. Eso sí, ¿merece la pena ese despliegue para dormir en el jardín? Yo creo que optaría por simplificar si quisiera dormir en el jardín e invertir mis esfuerzos en crear una buena zona de tertulia en esa parte en la que disfrutar de las veladas veraniegas.
Imagen vía | Spencer Lake En Decoesfera | Silla Afterglow, para disfrutar del jardín de noche
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