El arquitecto Gio Ponti consideraba la silla Supperleggera una de sus tres obras maestras, junto con la Torre Pirelli de Milán y la Concattedrale Gran Madre di Dio de Taranto... ¡Ahí es nada! La silla, que representa un símbolo de perfección y equilibrio entre solidez y ligereza, con una sección triangular de 18 mm y un peso mínimo de 1,7 kg, cumple ahora 60 años tan seductora como el primer día.
Tal vez algunos de vosotros no sabíais que su creador fue pionero en fundir arquitectura y diseño industrial y el responsable de hacer de Italia la capital mundial del diseño en los años de posguerra y su obra continúa hoy en día de rabiosa actualidad. Tanto que Cassina ha decidido celebrar este sesenta aniversario con nuevos modelos.
Junto al clásico modelo, en color natural o teñido en negro o blanco ceniza, las versiones de las producciones de Cassina de los años 50 están ahora disponibles con asientos acolchados en diferentes cueros y tejidos extraíbles para que se puedan combinar con todo el mobiliario y los estilos de los ambientes de hoy en día.
Sus versiones especiales y combinaciones son casi infinitas como la silla blanca y negra o la edición limitada llevada a cabo por el artista holandés Bertjan Pot con un divertido estampado de colores para conmemorar este 60 aniversario de la Superleggera. ¿Cuál es el acabado que más os gusta para esta pieza icónica del diseño?
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